MADRID, 26 de diciembre.

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha hecho un llamado este jueves para llevar a cabo una "investigación exhaustiva" sobre el trágico accidente de un avión de Azerbaijan Airlines, que tuvo lugar el miércoles cerca de la ciudad de Aktau, en Kazajistán, resultando en la muerte de al menos 38 personas.

La portavoz de la OTAN, Farah Dakhlallah, expresó en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X que “nuestros pensamientos y oraciones están con las familias y las víctimas del vuelo J28243 de Azerbaijan Airlines. Deseamos una rápida recuperación a los heridos en esta catástrofe y solicitamos que se realice una investigación completa”.

Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, advirtió también este jueves sobre el “error” que constituye formular teorías precipitadas respecto a las causas del accidente aéreo, en respuesta a las acusaciones de las autoridades ucranianas que apuntan a las defensas rusas como responsables de esta tragedia, mientras que las autoridades kazajas aún no han ofrecido una versión definitiva sobre lo sucedido.

En medio de este ambiente de especulaciones, han surgido reportes en las últimas horas que sugieren que el accidente pudo ser provocado por el impacto de una bandada de pájaros contra el avión, mientras que otros informes indican que una bombona de oxígeno a bordo podría haber explotado, lo que llevó a los pilotos a perder el control de la aeronave.

El avión en cuestión cubría la ruta que conecta la capital de Azerbaiyán, Bakú, con Grozni, la capital de la región rusa de Chechenia. Solo un par de horas después de despegar, la aeronave solicitó un aterrizaje de emergencia. Debido a la densa niebla que cubría Grozni, se desvió primero a Majachkalá, en Daguestán, y finalmente a Aktau, donde se estrelló a unos tres kilómetros del aeropuerto de esta ciudad, ubicada a orillas del mar Caspio.