El Papa ha instado a que los ricos paguen más impuestos para poder redistribuir la riqueza entre los pobres y la clase media, durante un encuentro en el Vaticano con representantes de movimientos populares.

En un evento bajo el lema 'Plantando bandera frente a la deshumanización', el Papa afirmó que los millonarios deberían pagar más impuestos y compartir su riqueza de manera fraternal, no como limosna.

Francisco también criticó el sistema económico actual, argumentando que "mientras no se resuelvan los problemas de los pobres, no se resolverán los problemas del mundo".

Además, el Papa cuestionó el protocolo antipiquete del Gobierno argentino y la represión a manifestantes que protestaban contra la reforma jubilatoria en el país.

En su intervención, también denunció la competencia exacerbada por el dinero como una actitud enfermiza y destructiva, que está dividiendo a la sociedad y destruyendo la creación.

El Papa pronunció sus palabras en silla de ruedas, mientras era observado por representantes de movimientos populares y de la Iglesia, como Ale Peluca Gramajo y el cardenal Michael Czerny.