El primer ministro británico, Rishi Sunak, se ha disculpado ante la comisión encargada de investigar la gestión de la pandemia de COVID-19 por aquellos que perdieron a sus seres queridos en esta crisis. Sin embargo, ha dejado claro que su papel como ministro de Finanzas era simplemente asesorar al entonces primer ministro Boris Johnson, quien era el último responsable de tomar decisiones.

Sunak se ha unido a la lista de testigos que comparecen ante esta comisión, que tiene como objetivo aprender lecciones para prepararse mejor para futuras crisis. El actual primer ministro se ha comprometido a colaborar de manera constructiva en las investigaciones.

El ministro ha reconocido que los últimos meses han sido complicados y ha afirmado que ha estado más tiempo con el primer ministro que con su propia esposa. Sin embargo, ha negado la existencia de problemas graves dentro del gobierno que hayan obstaculizado una respuesta adecuada a la pandemia. No ha habido choques internos según su testimonio.

Según Sunak, su papel consistía en brindar el mejor asesoramiento posible a Johnson, especialmente en términos económicos, pero la última palabra siempre recaía en el ex primer ministro. Además, ha justificado la falta de registros de reuniones y mensajes de WhatsApp, argumentando que no usa esta red de mensajería de manera frecuente y que ha cambiado de teléfono múltiples veces en los últimos años.