
El terror se apoderó de la localidad Hurfeish tras el ataque de dos drones kamikaze, dejando como trágico saldo la muerte de un militar israelí y diez heridos, entre ellos un reservista en estado grave.
El partido-milicia chií Hezbolá ha sido señalado como responsable de este ataque desde el sur de Líbano, según ha confirmado el Ejército israelí.
Rafael Kauders, un reservista, fue identificado como la persona fallecida, mientras que otro reservista resultó herido de gravedad y fue trasladado a un hospital para recibir tratamiento médico, informó el Ejército israelí.
La situación se tornó crítica luego de que dos drones impactaran en la zona, con la peculiaridad de que ninguna alarma antiaérea se activó durante el ataque, según reportes de la Radio del Ejército de Israel.
Hezbolá ha declarado públicamente ser el autor del ataque, afirmando también que ha habido bajas en las filas israelíes, aunque sin especificar un número concreto, según ha informado la cadena de televisión libanesa Al Manar.
Los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá han cobrado múltiples vidas, tanto de civiles como militares, desde hace cerca de ocho meses, sumando un total de al menos diez civiles y 15 militares y reservistas israelíes muertos hasta la fecha.
En Líbano, al menos 400 personas han perdido la vida como consecuencia de estos conflictos, según datos del Ministerio de Sanidad libanés, además de que otras 1.200 personas resultaron heridas en medio de la violencia.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha expresado su determinación ante las amenazas en la frontera con Líbano, destacando la preparación del Ejército israelí para una "acción muy poderosa" en respuesta a los ataques de Hezbolá.
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