Violentos disturbios estallaron en Jerusalén el lunes durante una manifestación frente al Parlamento que se extendió hasta la residencia del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. La Policía detuvo a nueve personas y tres resultaron heridas en los enfrentamientos.

Los agentes permitieron inicialmente la marcha, pero la situación se volvió tensa cuando algunos intentaron atravesar las vallas alrededor de la vivienda de Netanyahu. Entre los detenidos se encuentra Noam Dan, primo de la mujer de uno de los rehenes en Gaza.

Los organizadores de la protesta denunciaron el uso de fuerza excesiva por parte de la Policía, que empleó cañones de agua contra los manifestantes, resultando en tres personas heridas que tuvieron que ser hospitalizadas. Uno de los cañones impactó contra una sanitaria identificada como Tal Weissbach.

Además de Weissbach, otro manifestante sufrió una fractura de fémur y varios agentes resultaron levemente heridos. La Policía afirmó que los disturbios se volvieron violentos, con cientos de alborotadores atacando a los agentes, incendiando la carretera y rompiendo vallas, lo que llevó a la declaración de la protesta como ilegal y a la dispersión de los manifestantes.

Según la Policía, algunos detenidos son sospechosos de haber atacado a los agentes y otros de prender fuego en medio de los disturbios. A pesar de reafirmar el derecho a la libertad de expresión y protesta, las autoridades no tolerarán violaciones del orden público ni disturbios ilegales.

Los manifestantes exigían elecciones anticipadas y un acuerdo para la liberación de los rehenes en Gaza retenidos por Hamás. A medida que las calles bloqueadas fueron reabiertas, la tensión en la región sigue en aumento ante la agitación política en Israel.