Israel informa sobre la muerte de un presunto involucrado de Yihad Islámica en los ataques del 7 de octubre.

En el marco del conflicto que se vive en Oriente Medio, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo operaciones decisivas contra elementos terroristas que han supuesto una amenaza para la seguridad nacional de Israel. Este lunes, el ejército israelí anunció la eliminación de tres individuos considerados "terroristas", entre ellos uno que ha sido vinculado de manera directa al atentado terrorista perpetrado el 7 de octubre de 2023.
Según un comunicado del Ejército israelí compartido a través de su cuenta en la red social X, dos de los tres terroristas han sido identificados como Ahmed al Dalu, miembro de la Unidad de Inteligencia Militar de la organización Yihad Islámica, y Abu Ali Racha, quien ejerce como comandante del partido-milicia chií Hezbolá en la localidad de Baraachit, situada en el sur del Líbano.
El Ejército ha informado que en un ataque aéreo llevado a cabo por la Fuerza Aérea, bajo la supervisión del servicio de seguridad Shin Bet, se logró eliminar al terrorista Ahmed al Dalu. Este individuo había jugado un rol activo en el ataque del 7 de octubre contra el kibbutz Kfar Aza, y se le atribuyen más actos de violencia contra ciudadanos israelíes posteriores a este incidente.
S junto a al Dalu, el Ejército israelí también ha informado de la muerte de otro presunto terrorista, aunque no han proporcionado su nombre. Por otro lado, Abu Ali Racha ha sido señalado por las autoridades israelíes como el responsable de planificar y ejecutar ataques con cohetes y misiles antitanque contra las fuerzas israelíes, así como de supervisar las operaciones de Hezbolá en la región.
Las Fuerzas Armadas de Israel han afirmado que los ataques aéreos contra este líder terrorista se realizaron bajo la dirección de la 36ª División, logrando así neutralizar a Abu Ali Racha, lo que representa un duro golpe a la infraestructura operativa de Hezbolá en la zona.
Por su parte, las autoridades en la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han proporcionado cifras alarmantes sobre las consecuencias de la ofensiva militar en el enclave, asegurando que más de 43.300 personas han perdido la vida desde el inicio de las acciones militares que se desencadenaron tras los ataques de octubre, y más de 102.000 han resultado heridas.
La ofensiva militar de Israel en Gaza fue desencadenada como respuesta a los atroces ataques del 7 de octubre, que dejaron un saldo lamentable de alrededor de 1.200 israelíes muertos y cerca de 250 secuestrados, según la información proveída por las autoridades israelíes. Este escenario se complica aún más con la cifra de aproximadamente 750 palestinos muertos debido a intervenciones de las fuerzas de seguridad israelíes y ataques por parte de colonos en Cisjordania y Jerusalén Este desde entonces, además de los cerca de 3.000 palestinos fallecidos en operaciones israelíes en Líbano.
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