Una mujer de alrededor de 70 años resultó herida por el impacto de metralla en una mano debido a uno de los proyectiles lanzados contra la ciudad de Haifa.

MADRID, 8 Oct.

El grupo Hezbolá, formado por milicias chiítas, ha llevado a cabo un ataque lanzando más de 80 proyectiles contra la ciudad de Haifa, ubicada en el norte de Israel. Este acontecimiento representa el mayor ataque contra la localidad en un año de conflictos. Mientras tanto, el Ejército israelí ha realizado un nuevo bombardeo contra supuestos "objetivos" del grupo en la capital libanesa, Beirut.

El lanzamiento de los proyectiles tuvo lugar durante un discurso pronunciado por el vice secretario general de Hezbolá, Naim Qasem. El Ejército israelí reportó alrededor de 85 lanzamientos, la mayoría de los cuales fueron interceptados por el sistema de defensa aérea, aunque se confirmaron varios impactos.

Más tarde, el servicio de ambulancias Magen David Adom comunicó que una mujer de unos 70 años fue herida por el impacto de un proyectil en Haifa. La mujer sufrió heridas en una mano y fue trasladada a un hospital en estado leve a moderado pero consciente.

Según informes del diario 'The Times of Israel', el ataque también causó daños materiales en la zona, con impactos confirmados en Kiryat Motzkin, aunque no se reportaron más víctimas hasta el momento.

Por otra parte, el Ejército israelí bombardeó "objetivos terroristas de Hezbolá" en el sur de Beirut, sin que se hayan reportado víctimas hasta el momento. El bombardeo tuvo como blanco el barrio de Haret Hreik, que ha sido escenario de varios ataques recientes, según reportó la agencia estatal libanesa de noticias, NNA.

En su discurso, Qasem afirmó que las tropas israelíes no han logrado avances significativos en el sur de Líbano tras una nueva invasión la semana pasada. También destacó que Hezbolá ha superado los golpes sufridos a nivel organizativo tras la muerte de altos mandos, incluido su líder, Hasán Nasralá, en bombardeos israelíes.

Qasem enfatizó que las capacidades de Hezbolá siguen siendo fuertes y desmintió las afirmaciones del enemigo sobre daños en sus filas. También expresó su apoyo al presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, en sus esfuerzos por lograr un alto el fuego.

"Si el enemigo continúa la guerra, todo se decidirá en el campo de batalla y nosotros no rogaremos por una solución", reiteró Qasem, indicando que Hezbolá no buscará un alto el fuego. "Continuaremos y nos sacrificaremos y, si Dios quiere, escucharán gritar al enemigo", concluyó.