En el día de hoy, el líder de la oposición venezolana, Edmundo González Urrutia, ha elogiado la resolución del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que ha pedido a las autoridades venezolanas que divulguen las actas electorales, instando a ambas partes a evitar cualquier comportamiento que pueda poner en peligro la búsqueda de una solución pacífica a esta crisis.

"Hoy hemos logrado, con consenso en la OEA, que se levante la voz en apoyo a la voluntad de todos los venezolanos, exigiendo la publicación de las actas y el compromiso con el camino hacia una Venezuela libre, democrática, con garantías y respeto", declaró el opositor en una publicación en su cuenta de la red social X.

González Urrutia recibió con "esperanza" esta decisión y celebró que, con acciones como esta, la oposición "avanza cada día más", a pesar de que a veces puedan sentir que el camino se complica debido a la seria persecución y amenazas.

"Hemos trabajado incansablemente cada día para hacer realidad el cambio que los venezolanos han pedido, Venezuela votó por un cambio para recuperar la credibilidad y la esperanza, y no descansaré hasta lograrlo", agregó el político opositor.

"La verdad nos hará libres; no estamos solos", concluyó, luego de que la OEA haya solicitado de manera unánime al Consejo Nacional Electoral (CNE) que publique las actas y respete "el principio fundamental de la soberanía popular a través de una verificación imparcial de los resultados que asegure la transparencia, credibilidad y legitimidad del proceso electoral."

La organización enfatizó "la importancia de (...) salvaguardar toda la cadena de custodia del proceso de votación", así como de "respetar los Derechos Humanos y las libertades fundamentales" de los venezolanos, lo cual debe ser "una prioridad absoluta y una obligación para Venezuela y para todos los Estados de las Américas."

Esta resolución se produce después de que los países de la OEA no pudieran ponerse de acuerdo a principios de agosto para emitir un dictamen conjunto que exigiera a Venezuela la divulgación de las actas electorales, debido a once abstenciones, incluidas las de Bolivia, Brasil y Colombia.