En un sombrío acontecimiento que ha conmovido a Austria, las fuerzas de seguridad han encontrado un artefacto explosivo improvisado y una carta de suicidio en la vivienda del presunto autor del trágico tiroteo ocurrido en una escuela de Graz. Este ataque dejó un saldo devastador de diez muertes, entre las cuales se incluyen nueve jóvenes estudiantes de la institución.

En respuesta a esta tragedia, el Gobierno austriaco ha anunciado tres días de luto nacional. Además, este miércoles se realizó un minuto de silencio a las 10:00 horas en todo el país, como muestra de respeto hacia las víctimas y sus familias. En este contexto, las autoridades se encuentran investigando las razones que llevaron a un exalumno de 21 años a perpetrar este acto de violencia antes de quitarse la vida.

Según la información proporcionada por la Policía, la carta de suicidio hallada no arroja luz sobre las motivaciones del tirador, y se desconoce la razón por la cual había fabricado un posible artefacto explosivo, tal como reporta la cadena ORF. Sin embargo, los investigadores han confirmado que el sospechoso contaba con la licencia necesaria para poseer las dos armas utilizadas durante el ataque.

Por otro lado, los médicos han indicado que las doce personas heridas en el tiroteo están estables, aunque algunas continúan recibiendo atención en unidades de cuidados intensivos. En un intento por abordar los efectos de esta tragedia en la comunidad, las autoridades han establecido un servicio de apoyo psicológico, fundamental para una ciudad pequeña como Graz, que alberga alrededor de 300.000 habitantes.