El congresista republicano George Santos ha sido imputado por el Departamento de Justicia después de que se revelaran una serie de mentiras sobre su historial laboral, financiero e incluso identidad. Esto ha provocado que incluso miembros de su propio partido, el Partido Republicano, se hayan alejado públicamente de él.

Aunque los cargos que se le imputan todavía no se conocen, se espera que Santos acuda al distrito este de Nueva York, donde se investigará el caso, este miércoles para escuchar los cargos que se le imputan. La cadena CNN, citando fuentes cercanas al caso, ha informado de que tanto el Departamento de Justicia como el FBI están trabajando conjuntamente en la investigación.

Entre las acusaciones que se han vertido sobre él desde el inicio de su carrera política se encuentran la presunta infracción de las leyes de financiación de campañas electorales, la violación de las leyes federales sobre conflictos de intereses, el robo de dinero destinado al perro moribundo de un veterano de la guerra de Irak y la presunta participación en una trama de fraude con tarjetas de crédito. Además, Santos ha sido acusado de mentir sobre su carrera y educación, incluyendo una falsa herencia judía vinculada al Holocausto y una madre que supuestamente había fallecido en los atentados del 11 de septiembre de 2001.

En marzo, el Comité de Ética de la Cámara de Representantes de Estados Unidos abrió una investigación después de que Santos admitiera haber mentido en su currículum antes de su elección a la Cámara en 2020. Numerosos miembros de su partido han pedido públicamente que renuncie a su escaño ante el escándalo.

Aunque Santos ha admitido que las informaciones sobre su carrera y educación no han sido siempre ciertas, ha negado las acusaciones más graves y hasta ahora se ha negado a dimitir.