BRUSELAS, 3 de septiembre. La Comisión Europea ha tomado una decisión firme al rechazar este miércoles la posibilidad de legislar sobre el reconocimiento de las denominadas "regiones nacionales" en el ámbito de su política de cohesión. Esta decisión se produce a raíz de una Iniciativa Ciudadana Europea que buscaba asegurar la igualdad entre las diferentes regiones y preservar sus culturas.

Los solicitantes abogaban por que las políticas de la comunidad prestaran atención especial a las regiones que presentan características nacionales, étnicas, culturales, religiosas o lingüísticas que las distinguen de las áreas circundantes. Sin embargo, las autoridades europeas han determinado que no es viable avanzar en esta dirección.

Según un comunicado emitido por la Comisión, tras un análisis exhaustivo de la solicitud, se ha llegado a la conclusión de que varias de las propuestas no son competencia de la UE, ya que podrían alterar la estructura constitucional de los Estados miembros. Además, han señalado que otros aspectos ya están contemplados en la actual política de cohesión existente.

El Ejecutivo comunitario subrayó que la normativa regional de la UE ya cuenta con mecanismos robustos que garantizan la inclusión y la igualdad de trato para las minorías, al mismo tiempo que fomentan el respeto por la diversidad cultural y lingüística en toda Europa.

En consecuencia, la Comisión ha optado por no presentar nueva legislación en respuesta a la Iniciativa Ciudadana, pero seguirá asegurando un acceso equitativo a la financiación de la Unión Europea. Además, mantendrá su vigilancia sobre las acciones de los gobiernos de los Veintisiete para asegurar que se respete la igualdad de trato en la implementación de la política de cohesión.