El portavoz del movimiento Al Fatá, Husein Hamayel, ha acusado a Israel de buscar la escalada del conflicto en la Franja de Gaza y en toda la región tras el asesinato de Salé al Aruri, líder del brazo político de Hamás. El ataque, llevado a cabo con un dron en Beirut, ha dejado claro que Israel es un Estado criminal que trabaja para aumentar la tensión en todas las fronteras. Según Hamayel, este asesinato no detendrá la lucha del pueblo palestino por liberarse de la ocupación israelí.

Hamayel también ha denunciado que, previamente a este ataque, se produjeron "asesinatos" de dirigentes de Acción Nacional Palestina, incluyendo miembros del antiguo Comité Central de Al Fatá. El portavoz palestino ha criticado el silencio internacional ante los crímenes israelíes y ha despedido a Al Aruri como un mártir por la causa palestina y un luchador por la unidad nacional.

El secretario del Comité Central de Al Fatá, Jibril Rajub, ha enviado sus condolencias a Ismail Haniyé, líder de Hamás, por la muerte de Al Aruri, a quien ha calificado como uno de los luchadores más leales de la causa palestina. Por otro lado, al menos siete personas han muerto y varias han resultado heridas tras el ataque con dron a las oficinas de Hamás en Mushrifiyá, en los suburbios de Beirut. Al Aruri, considerado el número dos del brazo político de Hamás y uno de los comandantes de las brigadas Al Qassam, estaba en Líbano desde 2018 y previamente había sido encarcelado por Israel durante doce años.