El piloto español de Fórmula 1, Carlos Sainz, quien compite con el equipo Williams, expresó en una reciente conferencia de prensa que su desempeño en las primeras carreras de la temporada no refleja su verdadero potencial. Afirmó que la idea de que pueda alcanzar resultados destacados en un corto lapso de tiempo con un coche que todavía está en fase de adaptación es incorrecta.

“Si se espera que muestre lo mejor de mí en solo tres carreras con un nuevo equipo, es evidente que no se comprende cómo funciona realmente este deporte”, declaró Sainz en la antesala del Gran Premio de Baréin. Añadió que es fundamental un proceso de ajuste que cada piloto debe atravesar para alcanzar su rítmico óptimo."

El piloto madrileño admitió que hasta ahora no ha completado un fin de semana de carrera ideal, aunque resaltó que se ha mantenido competitivo y ha logrado estar muy cerca de su compañero Alex Albon. “Ahora debo enfocarme en minimizar errores y mejorar mi rendimiento. No estamos tan lejos como se podría pensar. Estoy convencido de que conseguiré un fin de semana perfecto y eso se traducirá en buenos resultados”, explicó Sainz.

Asimismo, Sainz compartió que, en ocasiones, subir al monoplaza de Fórmula 1 se siente como una experiencia natural, algo que le ocurrió el año pasado en Abu Dabi y este año en Baréin. “Al subirme al coche, me encontré rápidamente a gusto con su manejo, incluso superando mis propias expectativas”, destacó el piloto sobre sus sensaciones iniciales con el Williams.

Sin embargo, reconoció que en el Gran Premio de Australia las cosas cambiaron y eso afectó su confianza en otras pistas. "En circuitos como China y Japón, me sentí bloqueado en cuanto a cómo extraer ese último decimal de velocidad. Es en esos momentos cuando hay que analizar datos y colaborar con los ingenieros para mejorar la comprensión del coche, un proceso que requiere tiempo y experiencia”, indicó.

Sainz también destacó que es necesario ajustar varios aspectos de su estilo de conducción para maximizar el rendimiento del Williams. “El Ferrari tenía un equilibrio específico, resultado de años de desarrollo. Ahora, al competir con otro coche, hay que adaptarse de nuevo. No es que deba desaprender, sino recordar que la dinámica en ciertas curvas es diferente”, explicó.

El piloto considera que es prácticamente imposible ser competitivo en tres carreras con un vehículo nuevo. “Es fundamental aprender de nuevo cómo manejar cada aspecto del coche. No estoy en una mala situación, pero necesito realizar un fin de semana perfecto, sin penalizaciones, y asegurarme de clasificar bien. La Q2 es crucial para nosotros: no marcar un buen tiempo allí puede arruinar todo el fin de semana”, observó Sainz.

Mirando hacia adelante, el piloto se muestra optimista de cara al próximo Gran Premio, donde ha tenido buenas experiencias en el pasado. “En las pruebas de Baréin, me sentí cómodo y rápido, sin tener que pensar demasiado en cómo pilotar, a diferencia de lo que experimenté en China o Suzuka, donde tuve que lidiar con más complicaciones”, comentó.

“La clave es sobrevivir a estos primeros fines de semana. Aunque muchos esperaban que estuviera al frente del pelotón, soy consciente de que no estoy aún al nivel que necesito para competir. En mis propias palabras, he advertido que el comienzo de la temporada sería complicado, especialmente con Alex dando lo mejor de sí. Estoy comprometido con mi progreso y estoy seguro de que los buenos resultados llegarán”, concluyó Sainz.