
En Madrid, el 30 de junio, la líder de Podemos, Ione Belarra, ha expresado su preocupación tras la reciente decisión del Tribunal Supremo de enviar a prisión provisional a Santos Cerdán, exnúmero tres del PSOE, por presunta corrupción. Según Belarra, este acontecimiento representa un golpe profundo para la democracia y para aquellos que se consideran parte de la mayoría progresista en el país, calificándolo de un daño que no se puede reparar.
La secretaria general del partido morado denunció a través de redes sociales que el PSOE ha traicionado la confianza de sus votantes al involucrarse en prácticas corruptas, haciendo alusión a la aprobación de dicha medida en el marco del denominado caso Koldo. La indignación parece ser un sentimiento compartido en ciertos sectores políticos en relación con este escándalo.
En la misma línea, Pablo Fernández, secretario de Organización de Podemos, ha afirmado que es alarmante que Cerdán vaya a cumplir tiempo en prisión antes de que el presidente Pedro Sánchez se presente ante el Congreso de los Diputados para rendir cuentas sobre esta situación. La comparecencia de Sánchez está programada para el 9 de julio, y Fernández ha enfatizado la gravedad de la situación.
Fernández también ha aprovechado la ocasión para criticar el comportamiento del bipartidismo, mencionando figuras del pasado como Felipe González, José María Aznar, Mariano Rajoy y Isabel Díaz Ayuso. En su opinión, la corrupción es un patrón recurrente en la política de los grandes partidos.
En una comparecencia ante los medios, Fernández subrayó que Sánchez tiene una responsabilidad directa al haber aceptado a Cerdán en su equipo, sin importar si tenía conocimiento previo de las supuestas actividades ilícitas del exdirigente socialista. Además, hizo un llamado a los socialistas, destacando que no existen mecanismos que puedan proteger a Sánchez de las repercusiones de este escándalo y que intentar ocultarse no aliviará la presión que enfrenta.
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.