Madrid, 12 de marzo. El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha decidido imponer una severa sanción de cinco partidos al delantero argentino del Atlético de Madrid, Ángel Correa, tras su expulsión durante el partido contra el Getafe CF. Los hechos se produjeron durante un incidente en el que se le mostró la tarjeta roja y luego, en un momento de frustración, profirió insultos al árbitro Guillermo Cuadra Fernández.

El árbitro, tras recibir una recomendación desde el VAR, tomó la decisión de expulsar a Correa por una entrada sobre el defensor Djené Dakonam. El informe arbitral destaca que el jugador argentino lanzó insultos mientras se retiraba del campo, incluyendo expresiones sumamente graves contra la autoridad del árbitro.

En consecuencia, el Comité de Competición aplicó una sanción que incluye un partido por la expulsión y cuatro adicionales por los insultos dirigidos al árbitro, estableciendo así un castigo que se encuentra en el límite inferior de las posibles sanciones, que podían llegar hasta 12 partidos.

Con esta decisión, Correa se perderá partidos clave en el futuro inmediato, incluyendo el enfrentamiento contra el FC Barcelona y otro crucial en las semifinales de la Copa del Rey MAPFRE. En total, el jugador argentino podría estar fuera de las canchas por más de un mes, especialmente si el Atlético de Madrid queda eliminado de la Liga de Campeones por el Real Madrid.

El club ha intentado revertir la decisión, argumentando que Correa no merecía la expulsión y alegando que se trató de un error evidente. Además, el Atlético afirmó que las palabras de Correa debían considerarse como un menosprecio y solicitaron que se tuviera en cuenta su disculpa posterior al encuentro como un atenuante.

Sin embargo, el Comité desestimó ambas alegaciones, señalando que no se presentó evidencia suficiente para respaldar la reclamación de error. También recalcaron que las expresiones utilizadas por Correa constituyen una infracción grave según el Código Disciplinario de la RFEF.

En su comunicado, el organismo dejó en claro que ninguna de las razones presentadas por el club podría ser considerada como una justificación válida para el comportamiento indebido del jugador, independientemente de la presión emocional que puede generar un partido. A pesar de que valoraron las disculpas de Correa en redes sociales, enfatizaron que estas no pueden ser tomadas en cuenta como atenuantes en un sentido estricto.