
En un emotivo y reservado acto, Madrid dio el último adiós a la talentosa actriz Verónica Echegui, quien falleció a la temprana edad de 42 años debido a un cáncer el pasado 24 de agosto. La ceremonia se llevó a cabo en el Tanatorio de La Paz, donde solamente se reunieron sus familiares y amigos más cercanos, en un ambiente de recogimiento que reflejaba el profundo respeto y cariño hacia la inolvidable intérprete, que había mantenido su enfermedad en estricto secreto.
Tras la conmovedora noticia que sacudió al ámbito cinematográfico, varias personalidades de la industria se acercaron a la capilla ardiente para rendir homenaje a Echegui, reconocida por su papel en 'Yo soy la Juani'. Allí estuvieron presentes figuras como Paco León, María Adánez, Silvia Alonso y Cayetana Guillén Cuervo, quienes no quisieron perder la oportunidad de despedir a una de las actrices más brillantes de su generación, destacando el impacto que tuvo en el medio.
Entre los que asistieron también se encontraba Álex García, el exnovio de Verónica, con quien compartió una relación de 13 años que finalizó en 2023. Visiblemente afectado, no se separó del ataúd durante su estancia en el tanatorio, mostrando su dolor ante las cámaras y los asistentes en un momento tan desgarrador, lo que pone de manifiesto el vínculo especial que aún mantenían, pese a su separación.
El homenaje hacia Echegui se celebró a las 11:00 horas con una ceremonia civil que se desarrolló en un entorno íntimo y exclusivo. El acto, que duró aproximadamente 25 minutos, estuvo lleno de emoción, aplausos y lágrimas, mientras todos recordaban los momentos compartidos con la actriz. Álex García, claramente devastado, hizo una aparición pública que reflejaba la tristeza que le embargaba, evidenciando la profunda pérdida que significaba la partida de Verónica.
El actor llegó acompañado de su representante Antonio Abeledo, quien también había sido un apoyo en la carrera profesional de Echegui. Vistiendo de negro, con pantalones oscuros y una camisa blanca, su expresión de desolación era palpable mientras se movía por el interior del tanatorio. Era evidente que el dolor por la pérdida de su pareja de tantos años había sido una carga pesada de llevar, lo que lo llevó a abstenerse de hablar con la prensa y hizo de este momento un homenaje silencioso a la memoria de Verónica Echegui.
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