MADRID, 7 de octubre (Nota Conservadora) -

Es indiscutible que Bárbara Mirjan deslumbró en su reciente enlace con Cayetano Martínez de Irujo, posicionándose como uno de los ejemplos más significativos de elegancia nupcial de la actualidad. La clave de su éxito radica en el espectacular vestido confeccionado por Navascues, que se convirtió en la gran estrella de su día especial.

La prenda, concebida de manera exclusiva por la diseñadora Cristina Martínez-Pardo Cobián, destaca por su estructura de crepé, escote cuadrado, y un ajuste perfecto en la parte superior. Con mangas desmontables que le permitieron modificar su look durante la celebración, el vestido presentaba una imponente falda de organza, adornada por un bordado floral que rinde homenaje a la Semana Santa de Sevilla, en particular a la saya que representa a la Virgen de la Hermandad de los Gitanos, que es muy querida por la familia Alba.

Este singular diseño incorporaba una larga cola independiente, que Bárbara decidió desprenderse durante el banquete para mayor comodidad, así como un velo de tul de seda natural que coincidia en tono con el vestido, realzando su imagen de perfección.

Entusiasmada por los elogios que ha recibido su diseño, la creativa de Navascues, Cristina Martínez-Pardo, ofreció una entrevista a Europa Press en su atelier. Durante la conversación, reveló las ideas iniciales de la ahora duquesa de Arjona sobre su atuendo nupcial y mostró en primicia un boceto que planea enmarcar como regalo para que Bárbara conserve un recuerdo inolvidable de esta ocasión tan significativa.

- CHANCE: Cristina, enhorabuena por el vestido de Bárbara. ¿Cómo describirías esta obra maestra?

- CRISTINA: La verdad es que hemos vestido a muchas novias en Navascues y cada una tiene su propio encanto, pero trabajar con alguien de su perfil fue un placer. Bárbara es una mujer extraordinaria que tenía muy claro lo que deseaba, facilitándonos enormemente el proceso. Lo mejor de todo fue la oportunidad de conocerla.

- CH: Es impresionante cómo los bordados hacen alusión a la familia Alba y a la Semana Santa de Sevilla.

- CRISTINA: Los bordados fueron realizados por el talentoso José María Fernández, proveniente de una renombrada familia de bordadores. El motivo del bordado se inspiró en la saya de la Virgen de las Angustias, que la cofradía de los gitanos exhibe en sus procesiones. Este detalle estuvo presente en la cintura del vestido, en el delantero y la parte trasera, incluyendo motivos florales evocadores del mantón de Manila.

- CH: La comodidad es un aspecto fundamental, especialmente considerando que muchas novias optan por cambiarse de atuendo.

- CRISTINA: Nuestro objetivo siempre es garantizar movimiento y confort, a pesar de que el traje de novia por su propia naturaleza no es lo más cómodo. Así que trabajamos para que Bárbara pudiera lucir todas las piezas del vestido y ser flexible durante la celebración, llegando a disfrutar de un gran movimiento gracias a la amplia falda de organza.

- CH: La influencia de Sevilla es palpable. ¿Qué papel jugó Bárbara en el diseño del vestido?

- CRISTINA: Desde su primer visita a Navascues, le mostramos diferentes estilos para que pudiera elegir el que mejor le sentaba. En esa primera reunión, se dio lugar una conversación enriquecedora sobre Sevilla, sus tradiciones y emociones, lo que nos permitió crear algo muy especial que le encantó desde el primer momento.

- CH: ¿Cómo fue la relación de trabajo con ella? ¿Dejó todo en vuestras manos?

- CRISTINA: Tuvo un papel muy activo, sabía exactamente lo que quería, lo que hizo nuestra labor mucho más sencilla. Conocerla ha sido sin duda uno de los mejores momentos de este proceso. Es una persona entrañable y segura de sí misma.

- CH: También notamos un guiño a doña Cayetana, ¿verdad? Con esta fuerte presencia sevillana, ¿cómo se refleja eso en el diseño?

- CRISTINA: Ella nos solicitó que su vestido tuviera un reflejo de la Casa de Alba, queriendo rendir homenaje a doña Cayetana, la duquesa de Alba.

- CH: Algunos han mencionado un parecido entre el escote y el vestido de novias de la infanta Elena.

- CRISTINA: Es evidente que un escote cuadrado tiene sus similitudes, pero cada diseño tiene su propia esencia. El nuestro era un escote más marcado y adaptable para el baile y los movimientos de Bárbara durante la celebración.

- CH: En términos de trabajo colaborativo, ¿fue sencillo crear el vestido para Bárbara? ¿Desde el principio mostró confianza en ustedes?

- CRISTINA: Absolutamente, su confianza facilitó todo el proceso, tanto para el equipo como para nosotros. Simplemente queremos que cada traje sea perfecto, y contar con su apoyo fue esencial para lograrlo.

- CH: ¿Se realizaron muchas pruebas para lograr el vestido perfecto?

- CRISTINA: Sí, como es habitual en nuestro taller, tenemos un enfoque meticuloso y el traje necesita adaptarse a la perfección. Las pruebas son inevitables y cada novia merece toda nuestra dedicación. En Navascues, la pasión por lo que hacemos es nuestro lema.