El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha ordenado este miércoles la reapertura del espacio aéreo a todos los vuelos procedentes de Georgia casi cuatro años después de su cierre por motivos de seguridad.

La medida ha dejado sin efecto el decreto que recogía dicha restricción y que se remontaba al 21 de junio de 2019. Según el texto, el cierre del espacio aéreo en estos casos buscaba "garantizar la seguridad nacional de Rusia y proteger a sus ciudadanos de acciones ilegales y delictivas".

Para sorpresa de muchos, a partir de ahora quedará abolido el régimen de visados establecido para la entrada de ciudadanos georgianos al país, que se encuentra inmerso en la invasión de Ucrania. Esta decisión refleja el compromiso de Putin por afianzar los vínculos comerciales entre ambos países y alcanzar la paz en la región.

Además, el Gobierno ha retirado sus recomendaciones de no viajar a Georgia. "Al visitar el país deben tenerse en cuenta cuestiones de seguridad y actuar con cautela", ha alertado no obstante las autoridades rusas.

El cierre del espacio aéreo y el régimen de visados se introdujeron tras una ola de protestas registradas entre 2019 y 2020 en Tiflis, la capital de Georgia, contra el Gobierno y a favor de una nueva convocatoria de elecciones. Los manifestantes exigían la introducción de una reforma electoral y la dimisión del Gobierno. Ahora, con estas medidas de Putin, se abre una nueva etapa en las relaciones entre ambos países que podría contribuir a mejorar la estabilidad en la zona.