La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Ester Muñoz, ha levantado la voz este martes en relación a la reciente confirmación del procesamiento del hermano de Pedro Sánchez por parte de la Audiencia de Badajoz. Según Muñoz, esta situación es «sin precedentes» y, en cualquier democracia seria, sería motivo suficiente para la caída de un gobierno.

La Audiencia Provincial de Badajoz ha decidido llevar a juicio al hermano del presidente, David Sánchez, y al secretario general del PSOE en Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, por presuntos delitos de prevaricación administrativa y tráfico de influencias, al desestimar los recursos interpuestos por ambos.

En una comparecencia ante los medios, Muñoz subrayó que ya no se trata de una simple investigación y que las acusaciones de lawfare no tienen fundamento, dado que un tribunal ha decidido abrir juicio oral por estas serias acusaciones. A su juicio, la justicia está evidenciando las irregularidades que involucran a la familia presidencial y a personas cercanas al poder.

«Los chanchullos de la familia de Sánchez están en el centro de los tribunales», enfatizó Muñoz, quien también criticó la falta de explicaciones por parte del presidente y su entorno en medio de esta crisis. La portavoz del PP afirmó que los ciudadanos merecen claridad sobre el uso de los recursos públicos por parte de la familia del mandatario.

Muñoz aseguró que es increíble que circunstancias de esta gravedad no provoquen reacciones masivas en la sociedad española. En su opinión, la pasividad ante tales noticias es incomprensible y parece que se intenta desviar la atención hacia otros temas menos relevantes.

El secretario general del PP, Miguel Tellado, también se pronunció sobre el asunto, calificando la situación como un «escándalo sin precedentes» al ver a familiares del presidente y líderes del PSOE enfrentándose a la justicia. En un mensaje en la red social X, Tellado expresó su preocupación por la imagen de Sánchez, afirmando que su legado ya solo ofrece corrupción a los españoles y subrayando que no es digno del país que gobierna.

En tono crítico, Tellado deseó suerte a quienes, desde Moncloa, intentan distraer al público de estos escándalos, insinuando que están desesperados por encontrar nuevos temas para desviar la atención de la opinión pública. También condenó el uso de situaciones delicadas como la situación en Gaza como una herramienta para manipular la opinión, considerándolo una indecencia.