El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, ha admitido que persisten dificultades técnicas en las negociaciones con la Unión Europea y el Reino Unido sobre el Peñón, pero asegura que son desafíos que se pueden superar en la recta final del proceso. Picardo aboga por no fijar plazos para alcanzar un acuerdo definitivo.

El ministro se reunió por primera vez con el nuevo ministro de Exteriores británico, David Lammy, en Londres, quien transmitió el compromiso del Gobierno laborista de llegar a un acuerdo que brinde estabilidad a Gibraltar. Lammy reiteró que Londres solo aceptará un acuerdo que satisfaga plenamente a Gibraltar.

Por su parte, Picardo se mostró contento con el encuentro y con el nivel de comprensión por parte de Lammy sobre las preocupaciones de Gibraltar en las negociaciones con Bruselas. El ministro principal elogió la constancia de los laboristas en Downing Street.

En relación a las negociaciones, Picardo describió el proceso como una "montaña rusa" con avances en algunas áreas y obstáculos en otras. Destacó la importancia de llegar a un acuerdo beneficioso para todas las partes involucradas, respetando las líneas rojas de cada uno.

Picardo se negó a establecer un plazo para concluir las negociaciones, considerando que añadiría presión innecesaria al proceso. También señaló que cualquier cambio en la Comisión Europea o en las fronteras de la UE podría complicar la situación, por lo que prefiere mantener la flexibilidad en el tiempo de negociación.

Por otro lado, Picardo no tiene grandes expectativas sobre la próxima reunión entre el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, y su homólogo británico en Londres. Aclaró que el encuentro no tratará sobre Gibraltar y destacó que no aceptarían un diálogo bilateral entre España y el Reino Unido exclusivamente sobre el Peñón.