TOLEDO, 5 de abril.

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado hoy que no asistirá a la comisión del Senado que discutirá la ley de amnistía el próximo lunes, reafirmando su independencia de los partidos políticos y rechazando ser controlado por Ferraz o Génova.

Tras la inauguración del Centro de Atención Integral a Víctimas de Agresiones Sexuales en Albacete, García-Page ha criticado la postura de obligar a los presidentes autonómicos socialistas a retratarse en la comisión, considerándolo ofensivo y carente de sentido.

En cuanto al tema de un posible referéndum en Cataluña sobre la independencia, el presidente ha sido claro al afirmar que en cuestiones de soberanía nacional todos los ciudadanos de España deberían tener voz y voto, descartando la posibilidad de un referéndum exclusivo para la región catalana.

Además, García-Page ha cuestionado las reformas de las leyes de Memoria Democrática propuestas por el Partido Popular y Vox en algunas comunidades autónomas, argumentando que estas modificaciones buscan manipular la historia de España, al igual que el independentismo catalán.

El presidente regional ha expresado su preocupación por la necesidad de garantizar una narrativa histórica veraz, especialmente para las nuevas generaciones, evitando la confusión y desinformación que puedan surgir de interpretaciones sesgadas de la historia.

En definitiva, Emiliano García-Page ha destacado la importancia de desmentir la política falsa y asegurar que la ciudadanía esté informada de manera adecuada, para evitar que visiones distorsionadas de la historia tengan impacto en la sociedad.