En un giro reciente en el 'caso Koldo', el exasesor del ministerio, Koldo García, ha presentado una nueva solicitud al juez de la Audiencia Nacional, demandando la devolución de su teléfono móvil. Su argumento principal se centra en la necesidad de contar con este dispositivo para poder presentar pruebas en el acto de conciliación que ha solicitado a Claudia Montes, ex Miss Asturias 2017, quien lo ha acusado de acoso.

El exasesor, a través de un documento al que ha tenido acceso Europa Press, ha enfatizado la urgencia de recuperar su teléfono y otros dispositivos electrónicos, subrayando que son esenciales para defenderse de las serias acusaciones de acoso sexual y laboral que enfrenta.

García argumenta que su solicitud se basa en la "necesidad imperiosa" de salvaguardar su derecho a una defensa justa y efectiva en el contexto del acto de conciliación requerido a Montes. Este paso es crucial para él, ya que se prepara para presentar una querella por injurias y calumnias si no recibe una retractación de las acusaciones.

Su defensa sostiene que García debe acceder a las pruebas almacenadas en su teléfono para contrarrestar las graves acusaciones que se han hecho públicas. Sin ese acceso, se encuentra en una situación de indefensión, lo que vulnera su derecho a la defensa.

El equipo legal de García también ha manifestado que la decisión del juez de retener el dispositivo, aún después de realizar una copia forense, carece de justificación, ya que interfiere con derechos fundamentales en este momento procesal.

Esta solicitud se suma a un rechazo reciente del magistrado Ismael Moreno, quien el martes pasado denegó la petición de devolución de móviles y otros dispositivos no solo de García, sino también de su hermano y su exmujer, que fueron intervenidos durante los registros en sus domicilios.

El juez recordó que la retención de estos dispositivos es necesaria para asegurar la integridad de las pruebas en el proceso judicial, evitando cualquier posible alteración o deterioro durante su examen.

Además, el pasado 9 de julio, la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo también desestimó la solicitud de García para que se le devolviera su teléfono, complicando aún más su situación legal en el marco de este polémico caso que ha captado la atención mediática.