Indra ha reportado un beneficio neto de 291 millones de euros durante los primeros nueve meses del año, marcando un notable incremento del 58% en comparación con los 184 millones obtenidos en el mismo período del año anterior. Esta información fue hecha pública a través de un comunicado dirigido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El aumento significativo en los beneficios se atribuye, en gran medida, a la adquisición reciente de Tess Defence, una empresa especializada en vehículos blindados que cuenta con la participación de otros gigantes como General Dynamics, SAPA Placencia y Escribano Mechanical & Engineering.

Si se excluye este efecto extraordinario, el beneficio neto ajustado caería a 216 millones de euros, limitando el crecimiento al 17% en comparación con el mismo periodo de 2024.

En términos de ingresos, la compañía generó 3.611 millones de euros entre enero y septiembre, lo que representa un aumento del 6,2% respecto a los 3.400 millones alcanzados en los tres primeros trimestres de 2024.

Examinar las distintas áreas de negocio revela que la división de Defensa ha estado ganando protagonismo, representando el 21,15% de la facturación total del grupo con 764 millones de euros, lo que significa un crecimiento interanual del 13,5%. Por su parte, el segmento de Tráfico Aéreo alcanzó 364 millones de euros, incrementándose un 16,6% y contribuyendo con el 10% de las ganancias.

La división de Movilidad facturó 258 millones de euros, con un leve aumento del 0,78%, representando el 7,14% del total. Sin embargo, fue Minsait quien lideró la tabla con 2.226 millones de euros en ingresos, marcando un crecimiento del 3,1% y constituyendo el 61,64% del total, aunque en el año pasado había representado un 63%.

Adicionalmente, las adquisiciones realizadas por Indra en lo que va del año han contribuido con 115 millones de euros a las ventas, en comparación con los 17 millones del mismo lapso en 2024.

Las incorporaciones en Minsait, como Totalnet y MQA, y en Defensa con GTA, Deimos, Clue, Tess Defence y Aertec, han sido claves, así como las contribuciones de Micronav y Global ATS en el sector de ATM, detalló la empresa.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Indra alcanzó los 405 millones de euros en este periodo, lo que representa un incremento del 9,75% respecto a los 369 millones del año anterior.

Asimismo, el resultado neto de explotación (Ebit) se situó en 319 millones de euros, un ascenso del 9,62% en relación a los 291 millones registrados al cierre de los tres primeros trimestres del año pasado.

Con estos datos, el margen de Ebitda sobre la facturación se sitúa en un 11,21%, en comparación con el 10,85% del año previo, mientras que el margen de Ebit sobre ventas se mantiene en un 8,83%, reflejando una estabilidad similar al 8,5% del año anterior.

En cuanto a la deuda, al finalizar septiembre, Indra tiene una deuda neta de 114 millones de euros, un aumento significativo del 62,85% frente a los 70 millones de euros del mismo periodo del año anterior.

La cartera de pedidos de la empresa es otro indicador positivo, alcanzando los 9.512 millones de euros, lo que implica un crecimiento del 34,94% respecto a los 7.049 millones del año pasado. Es relevante mencionar que un 15,5% de esta cartera, equivalente a 1.476 millones de euros, proviene de la reciente consolidación de Tess Defence.

Respecto al flujo de caja libre, se reporta que al cierre de septiembre ha descendido a 57 millones de euros, un 39,36% menos que los 94 millones de euros registrados hace un año.

El presidente de Indra, Ángel Escribano, ha destacado la robustez de estos resultados y enfatizado el compromiso firme de la compañía de anticiparse a las necesidades del sector de defensa, lo cual ha promovido un incremento del 7% en su plantilla en España.

A finales de septiembre, Indra cuenta con un total de 61.475 empleados a nivel global, un crecimiento del 5%, con un especialmente notable aumento en España que supera las 36.000 personas.

“Estamos dejando huella en el sector, enfrentando desafíos y movilizando tanto la industria como el sector tecnológico del país, para atraer talento en áreas críticas para nuestra seguridad”, agregó el directivo.

En línea con estos resultados, el CEO José Vicente de los Mozos ha resaltado el progreso en todas las unidades de negocio, haciendo hincapié en las áreas de aeroespacial y defensa.

“La aceleración de nuestro plan industrial, junto con la expansión de nuestra capacidad productiva y tecnológica, nos posiciona para liderar la implementación de programas de modernización”, añadió.

De cara al futuro, Indra proyecta cerrar 2025 con unos ingresos de 5.200 millones de euros, un incremento del 7,37% respecto a los 4.843 millones de euros del año anterior. También anticipa un Ebit superior a 490 millones de euros, lo que significaría un crecimiento de cerca del 12% en relación a los 438 millones de euros del ejercicio pasado.

Las expectativas incluyen un flujo de caja libre de 300 millones de euros al final del año, representando una disminución del 8,5% comparado con el cierre de 2024. Además, la empresa ha programado un ‘Día del inversor’ para el segundo trimestre de 2026 para presentar, un año antes de lo previsto, la segunda fase de su plan estratégico hacia 2030.