MADRID, 24 de septiembre. En un nuevo cruce de acusaciones, el Partido Popular (PP) ha señalado al Gobierno español por su aparente inacción en la protección de las mujeres que sufren violencia de género. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, respondió a las críticas del PP, argumentando que dichas afirmaciones buscan crear una alarma social injustificada sobre los dispositivos de monitoreo para maltratadores.

Durante una sesión en el Pleno del Congreso, Montero defendió que las medidas implementadas han garantizado la seguridad de las mujeres en todo momento, sugiriendo que la oposición busca incrementar el sufrimiento de estas víctimas al manipular la información. Esta crítica vino a raíz de cuestionamientos planteados por la diputada del PP, María Muñoz, quien planteó lo complicado que es para las mujeres denunciar a sus agresores debido al miedo.

Muñoz insistió en que muchas de estas mujeres han creído que estaban protegidas por el Gobierno, sólo para darse cuenta de que el sistema les ha fallado. La diputada se refirió a alertas previas del Consejo General del Poder Judicial y otros organismos, sugiriendo que la ministra Ana Redondo tenía conocimiento de los problemas y había optado por minimizar su importancia.

La diputada criticó que el PSOE se dedicara a descalificar a quienes piden responsabilidad en este asunto y subrayó que el Gobierno no ha asumido su cuota de responsabilidad. Además, destacó que la ministra de Igualdad no ha renunciado a su cargo a pesar de las controversias surgidas.

Muñoz también recordó otras leyes del Gobierno que, en su opinión, han tenido efectos negativos, como la ley del "sí es sí", que ha originado la excarcelación de agresores. También criticó la falta de financiación en políticas como la ley ELA y cuestionó la gestión de las causas humanitarias, sugiriendo que el Gobierno actúa solo impulsado por una agenda política oportunista.

Frente a estas acusaciones, Montero rechazó las afirmaciones del PP, tildándolas de engañosas. Afirmó que la seguridad de las mujeres ha sido una prioridad del Gobierno y descalificó los intentos del PP de generar desconfianza en la efectividad de las medidas actuales.

La vicepresidenta lamentó que el Partido Popular se centre en crear alarmas en lugar de contribuir a debates constructivos sobre la protección de las mujeres. Además, señaló que los vínculos del PP con partidos que minimizan la violencia de género son un obstáculo para avanzar en políticas feministas efectivas.

Montero también retó al PP a que apoye la próxima ley de abolición de la prostitución, insinuando que esto revelaría su verdadero compromiso con la protección de las mujeres, concluyendo que el futuro del debate sobre igualdad depende de las acciones que cada partido tome en el Parlamento.