A partir de la próxima semana, la catequesis de los miércoles contará con una nueva traducción al chino, un desarrollo significativo que refleja el crecimiento de la evangelización en esa región y el reconocimiento de la diversidad cultural del catolicismo contemporáneo.

En una reciente intervención, el Papa Francisco ha expresado su profunda preocupación por la situación que enfrentarán los ucranianos durante el invierno, donde muchos se verán obligados a soportar el frío sin calefacción, lo que añade una carga considerable a su sufrimiento. Además, ha exhortado a la comunidad a elevar sus oraciones por Ucrania, un país que se encuentra bajo la constante amenaza de nuevos ataques por parte de las fuerzas rusas dirigidos a su infraestructura energética.

Durante la audiencia general, el Santo Padre hizo un llamado para que no se olvide al pueblo ucraniano, que enfrenta difíciles circunstancias. Dirigiéndose a los niños presentes, les animó a empatizar con sus pares en Ucrania, quienes enfrentarán un invierno implacable y riguroso. "No olvidemos al atormentado pueblo ucraniano, que tanto sufre", indicó el pontífice.

Además, el Papa Francisco, en su mensaje, extendió sus oraciones hacia la región de Tierra Santa, haciendo un llamamiento a la paz en Palestina e Israel. "Que haya paz, que haya paz. La gente está sufriendo mucho. Recemos por la paz, todos juntos", fueron sus palabras, subrayando la necesidad de unidad y esperanza en tiempos de conflicto.

En lo que respecta a la catequesis, el Pontífice ha señalado que aunque no todos los miembros de la Iglesia pueden ser apóstoles o profetas, cada uno está llamado a ejercer la caridad, la paciencia y a ser constructores de paz, recordando la importancia de la alegría en la vida cristiana.

Reflexionando sobre la gracia y los carismas, el Papa destacó los frutos del Espíritu Santo, señalando que la alegría, como fruta del Espíritu, difiere de la alegría humana común. "La alegría que proviene de Dios no se ve afectada por el desgaste del tiempo", afirmó, resaltando que al compartir esta alegría, esta se multiplica y se vuelve contagiosa entre los fieles.

El Papa Francisco indicó que solo a través de un encuentro auténtico con el amor de Dios se puede experimentar una amistad verdadera que rescata a las personas de la soledad y la autorreferencialidad. Citó su exhortación apostólica 'Evangelii Gaudium' para subrayar que, al experimentar este amor, surge el deseo inevitable de compartirlo con quienes nos rodean.

En su mensaje, también hizo mención a San Felipe Neri, conocido por ser "el santo de la alegría", enfatizando que su alegría tenía su origen en un profundo amor por Dios. Francisco instó a los fieles a seguir este ejemplo, recordándoles que el Evangelio jamás debería ser transmitido con actitudes de tristeza o desánimo.