En Madrid, el 5 de noviembre, varias organizaciones ambientalistas, incluyendo Ecologistas en Acción, Greenpeace y Alianza Verde, han expresado su descontento con el acuerdo alcanzado por los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea. Este pacto establece un objetivo legalmente vinculante de reducir las emisiones contaminantes en un 90% para el año 2040, incorporando cláusulas de flexibilidad que, según los críticos, diluyen el compromiso presentado originalmente. Estas agrupaciones consideran que tal decisión refleja una significativa "pérdida de liderazgo" por parte de Bruselas en la esfera climática y demandan que España adopte una postura más ambiciosa a nivel interno.

Desde Ecologistas en Acción se advierte que este acuerdo representa "un paso atrás" en la batalla contra la crisis climática, destacando que con esta medida, la UE pierde su posición de liderazgo en el tema. La organización señala que el objetivo del 2040 debería ser alcanzar la neutralidad climática en lugar de una simple reducción del 90% en las emisiones.

Javier Andaluz, responsable de Clima y Energía de la ONG, ha añadido que ciertos aspectos de los mercados de carbono pueden ser interpretados como formas de "neocolonialismo", que obstaculizan el desarrollo de zonas que luchan por erradicar problemas como el hambre. Esta perspectiva resalta cómo en otros lugares se limitan capacidades fundamentales para el progreso.

Por su parte, Greenpeace ha subrayado que el acuerdo refleja una "falta de ambición" por parte de la UE y evidencia la diferencia entre lo que los gobiernos hacen y lo que realmente deberían estar haciendo. Pedro Zorrilla, encargado de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace, ha enfatizado que el pueblo español demanda que el Gobierno aumente "de manera significativa" los objetivos climáticos actuales.

Además, Zorrilla ha recordado las difíciles experiencias del año pasado, marcado por eventos climáticos severos como la DANA y un verano devastador por incendios y olas de calor. En este contexto, tanto Greenpeace como la población exigen una respuesta climática mucho más decidida que la ofrecida hasta la fecha.

Asimismo, Alianza Verde ha denunciado la "rebaja" en las ambiciones climáticas europeas que, en su opinión, representa el acuerdo alcanzado. Esta organización exige a España que demuestre un compromiso genuino más allá de acciones superficiales en cumbres internacionales. El coordinador de Alianza Verde, Juantxo López de Uralde, ha criticado las "cesiones" que la UE está haciendo en materia ambiental, señalando que esto es bochornoso y dañino a largo plazo. "No actuar tiene consecuencias y cada retroceso tiene un costo incalculable", ha concluido.