En la jornada de ayer, el piloto español Carlos Sainz, que ahora representa a Williams en la Fórmula 1, hizo un llamado a la paciencia en cuanto a su desempeño en el inicio del mundial. Sainz afirmó que al cambiar de equipo es normal atravesar un periodo de adaptación que conlleva errores y aprendizajes, recordando que la transición requiere tiempo.

El corredor madrileño, que se prepara para el Gran Premio de Arabia Saudí, explicó que su enfoque es entender y mejorar en cada carrera, aceptando que habrá fines de semana donde sus resultados no serán los esperados. Hasta ahora, ha cosechado solo un punto en los primeros cuatro campeonatos, en contraste con su compañero de equipo, Alex Albon, quien ha sumado 18 puntos.

A pesar de sus dificultades, Sainz no está dispuesto a rendirse. Se mostró optimista, señalando que se encuentra en un proceso de aprendizaje continuo, en el que ajusta su estilo de conducción y trae consigo una mejor comprensión de su nuevo monoplaza. No obstante, confesó estar "desolado" por la reciente carrera en Baréin, donde un choque con el piloto japonés Yuki Tsunoda afectó seriamente su coche, impidiéndole sumar puntos.

Reflexionando sobre el incidente, Sainz indicó que tal vez debería haber sido más cauteloso al elegir sus batallas en pista. Recordó que la temporada anterior en Ferrari competía ferozmente contra Mercedes y Red Bull, pero esta vez, siendo consciente de su posición, necesita ser más estratégico al abordar los desafíos, especialmente en circuitos donde es más sencillo adelantar.

El español concluyó su intervención subrayando la importancia de evaluar mejor las oportunidades en la pista. En circuitos con mayor dificultad para adelantar, como Suzuka o Mónaco, es esencial luchar por cada posición. Sin embargo, su experiencia le ha enseñado que, en trazados como Baréin, lo más inteligente es priorizar terminar con puntos en lugar de arriesgarse en peleas innecesarias.