En un panorama meteorológico que parece advertir un cambio significativo en las condiciones climáticas, este viernes, cinco provincias del sur de España, concretamente en Andalucía, se verán afectadas por lluvias, tormentas y oleaje que han generado alertas. Huelva es la más impactada, con un riesgo importante catalogado como aviso naranja debido a posibles precipitaciones que podrían alcanzar hasta 80 litros por metro cuadrado en un periodo de 12 horas, especialmente en las áreas de Andévalo y Condado. Además, se prevén formaciones de mangas marinas a lo largo de su costa, lo cual podría tornar la situación aún más peligrosa.

En Cádiz, las alertas son de menor grado, con una notificación de nivel amarillo por lluvias y tormentas. Mientras tanto, provincias como Almería, Granada y Málaga enfrentarán riesgos atribuibles al oleaje. Estas variaciones en el clima obligan a la población a estar atenta y a prepararse ante lo que podría ser una jornada difícil en términos meteorológicos, bajo la supervisión de AEMET, la agencia meteorológica estatal.

Un análisis más exhaustivo revela que la causa detrás de este fenómeno es la presencia de una baja fría aislada que se ha establecido en el suroeste de la Península. Este sistema meteorológico está destinado a dejar un impacto significativo en diversas zonas del territorio español, particularmente en el tercio occidental, además del oeste del sistema Central, el oeste de Alborán, Levante y el sudeste, así como en las Islas Canarias. Los expertos no descartan que las precipitaciones puedan afectar también a áreas aledañas.

De acuerdo con los pronósticos, las lluvias más intensas se esperan en el Sistema Central occidental, en la región de Extremadura y en el oeste andaluz. Se anticipa que estas lluvias sean incluso localmente fuertes o persistentes, especialmente en Huelva y la costa de Cádiz, donde podrían desencadenar tormentas. Sin embargo, resulta importante señalar que el pronóstico no prevé necesidad de preocupación en las Islas Baleares, el Cantábrico, el alto Ebro, el nordeste de la península, algunas zonas del este de la meseta sur y en Melilla, donde se prevé que el clima permanezca más estable.

Por otro lado, se ha indicado que la calima continuará afectando a la Península, aunque su incidencia será menos notable en el nordeste del país. Esto podría resultar en la presencia de brumas y bancos de niebla matinales en diversas zonas montañosas, haciendo que la visibilidad pueda verse comprometida en esos territorios.

En lo que se refiere a las temperaturas, se espera un predominio de ascensos térmicos en muchas regiones. Los incrementos más significativos se prevén en el suroeste, donde se podrían registrar aumentos notables y también en el interior del Cantábrico. Por el contrario, en el alto Ebro, la Ibérica sur, y en el sur de los Pirineos se anticipa un descenso de las máximas, e incluso se prevén heladas débiles en ciertas áreas de los Pirineos.

Las temperaturas más elevadas serán observadas en diversas capitales de provincia, resaltando Santa Cruz de Tenerife con 25ºC, mientras que Granada y Málaga alcanzarían 24ºC. Además, se espera que Almería, Córdoba, Melilla, Las Palmas de Gran Canaria y Sevilla se sitúen en torno a los 23ºC, manteniendo la población pendiente de los cambios climáticos.

Finalmente, destaca la predicción de que en la Península y Baleares dominarán los vientos provenientes del este y sudeste. Se anticipan intervalos de viento fuerte o rachas muy intensas, particularmente en los litorales de Andalucía y del sudeste de la Península, siendo esta posibilidad igualmente aplicable a los litorales gallegos. En el archipiélago canario, se esperan vientos de componente oeste, lo que podría influir en las condiciones del mar y en diversas actividades al aire libre.