MADRID, 8 de mayo.

La estrella del tenis español, Carlos Alcaraz, está listo para hacer su regreso al circuito este viernes, enfrentándose al serbio Dusan Lajovic en el torneo de Roma, uno de los eventos más destacados de la temporada, que se celebra sobre tierra batida. Alcaraz viene de una pausa obligada debido a una lesión que le impidió participar en el Mutua Madrid Open, y buscará retomar el alto rendimiento que mostró en Montecarlo, donde salió campeón, y en Barcelona, donde llegó a la final.

Ha transcurrido un total de 19 días desde que Alcaraz sucumbiera ante Holger Rune en la final del Conde de Godó, un partido que resultó en molestias físicas que forzaron su ausencia en Madrid. Ahora, completamente recuperado y con el inicio de Roland Garros a la vista en poco más de dos semanas, el joven tenista de El Palmar está decidido a luchar por el título en Roma.

El principal objetivo de Alcaraz en esta competición va más allá de lograr una buena forma para el próximo Grand Slam en París. Antes de su lesión, el jugador había demostrado un comienzo prometedor en la temporada de tierra batida, con un torneo ganado en Montecarlo y una final en Barcelona. Además, en Roma, reanudará la competencia el número uno del mundo, Jannik Sinner, quien también estará volviendo tras un periodo de sanción. Una victoria del actual campeón de Roland Garros podría servir como un claro mensaje para Sinner a medida que se aproxima la cita parisina.

En este contexto, Alcaraz también tiene un incentivo adicional en el torneo romano: podría escalar al número dos del ránking mundial. Este ascenso le permitiría evitar un posible enfrentamiento en semifinales contra Sinner. Para lograrlo, el tenista necesita alcanzar al menos las semifinales o confiar en que el alemán Alexander Zverev no consiga revalidar su título en Roma.

Más allá de las posiciones en el ránking, Alcaraz debe enfocarse en recuperar su mejor forma de juego en Roma, así como en disfrutar nuevamente de las pistas y adaptarse al ritmo de la competencia tras su ausencia. En su debut, se enfrentará a Dusan Lajovic, un rival al que ha vencido en sus cuatro encuentros previos sin perder un solo set.

Si logra superar las expectativas y avanzar en el torneo, el sorteo le presenta un camino no tan difícil hasta los cuartos de final. Sus posibles rivales más desafiantes en esta etapa podrían ser el argentino Tomás Etcheverri, el búlgaro Grigor Dimitrov y el ruso Karén Khachanov.

Sin embargo, en las etapas más avanzadas, se podría encontrar en la antepenúltima ronda a Jack Draper, quien se enfrentará a él tras haber llegado a la final de Madrid, o a Holger Rune, su verdugo en Barcelona. En semifinales, podría toparse con Alexander Zverev, mientras que Sinner y Casper Ruud serían los oponentes más fuertes del otro lado del cuadro.

Este torneo romano marca solo la segunda participación de Alcaraz en su carrera, tras su debut en 2023, donde fue eliminado en la tercera ronda por el húngaro Fabian Marozán. Así que, si logra conseguir un par de victorias, establecerá un nuevo hito en su trayectoria sobre la tierra batida italiana.