En el día de ayer, la portavoz del grupo parlamentario Sumar, Verónica Martínez Barbero, ha vocalizado su respaldo hacia Daniel, el hijo menor de Juana Rivas, quien se enfrenta a la inminente entrega a su padre, acusado de malos tratos. Este procedimiento judicial que se llevará a cabo en septiembre ha generado un debate sobre la seguridad del menor en el contexto de la cooperación judicial entre países de la Unión Europea.

Martínez Barbero ha enfatizado en una reciente rueda de prensa que Daniel ha expresado en múltiples ocasiones su deseo de no regresar con su padre, que enfrenta serias acusaciones de maltrato. A su juicio, la aplicación estricta de la ley y la colaboración entre naciones no deben ser una excusa cuando se trata de la vida y bienestar de un niño.

La representante de Sumar ha denunciado que el joven no ha tenido la oportunidad de ser escuchado en los procedimientos judiciales que le conciernen. Martínez Barbero ha defendido el derecho de los menores a que su voz sea considerada en decisiones que impactan su futuro.

Con la esperanza de que el Tribunal Constitucional considere favorablemente el recurso planteado por Juana Rivas, la portavoz ha expresado su deseo de que Daniel permanezca en su entorno actual. Ha recordado que la protección del interés superior del menor es un principio fundamental recogido tanto en la Convención sobre los Derechos del Niño como en la legislación nacional sobre protección de menores.

“Daniel ha sido claro en su postura. No desea regresar con su padre, ya que no quiere vivir en un entorno de miedo”, concluyó Martínez Barbero, dejando clara la urgencia y seriedad de la situación que enfrenta el menor.