La reformulación de las reglas de Basilea III espera ser una realidad tan pronto como la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC) y la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) abandonen su situación de interinidad, según confirmó el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Jerome Powell.

En su comparecencia semianual ante la Cámara de Representantes, Powell reconoció que, a pesar de los avances en materia de inflación, aún queda trabajo por hacer para alcanzar el objetivo de estabilidad de precios del 2%.

El índice de precios de gasto de consumo personal (PCE) es la medida preferida por la Fed para controlar el costo de la vida, destacó Powell al comentar la aceleración de la inflación en enero al 3% según la lectura del IPC publicada recientemente.

Además, el presidente de la Fed señaló que Basilea III busca aumentar el nivel de capital que los grandes bancos deben mantener en reserva, lo que podría limitar su capacidad de préstamo pero garantizaría su supervivencia en caso de crisis financiera.

Por otra parte, Powell también abordó la independencia de la Fed y confirmó su firme determinación de no ceder a las presiones del presidente Donald Trump para renunciar, enfatizando que la Fed realiza su trabajo de manera objetiva basándose en la situación económica y los riesgos existentes.