Norris triunfa en el Red Bull Ring, McLaren logra un notable uno-dos y Alonso finaliza séptimo.

El Gran Premio de Austria, celebrado en el emblemático Red Bull Ring, se convirtió en un verdadero desastre para algunos de los pilotos más destacados del campeonato de Fórmula 1. Lando Norris, joven promesa británica de McLaren, se alzó con la victoria en un evento lleno de sorpresas, mientras que la jornada resultó ser un auténtico calvario para el español Carlos Sainz y el neerlandés Max Verstappen.

En esta undécima cita del calendario, Sainz no tuvo la oportunidad de demostrar su talento, ya que su monoplaza, el Williams FW47, presentó problemas mecánicos que lo mantuvieron fuera de competición desde el inicio. El madrileño se encontraba en la penúltima posición de la parrilla y se vio obligado a presenciar el inicio de la carrera desde los boxes, una decepción que empañó su fin de semana.

Por otro lado, Max Verstappen, quien llegaba como favorito a la cita, tampoco pudo capitalizar su potencial. En la primera vuelta, el piloto de Red Bull fue victima de un impactante accidente, siendo embestido por el italiano Kimi Antonelli, quien competía con Mercedes. Este incidente dejó a Verstappen fuera de carrera, frustrando sus aspiraciones de sumar puntos en un día que prometía ser prometedor para él.

Afortunadamente para McLaren, Norris lideró un podio compuesto por su compañero de equipo, Oscar Piastri, y el monegasco Charles Leclerc, piloto de Ferrari. La actuación de McLaren fue especialmente notable, marcando un claro dominio en la carrera y reafirmando su posición en la competitiva parrilla de la Fórmula 1.