En un emotivo acto familiar, Lydia Lozano se presentó el miércoles en el tanatorio de La Paz en Tres Cantos, acompañada por su hermana y su esposo, Charly, para rendir homenaje a su madre, Sol Hernández, quien falleció el martes a la edad de 95 años.

Visiblemente conmovida, Lydia se dirigió a los medios de comunicación con sinceridad: “¿Qué quieren que les diga?” relató, compartiendo la difícil experiencia de recibir la noticia mientras se encontraba en Barcelona. “Estaba con un compañero y no sabía si volver a Madrid o quedarme, y al final, ya es un hecho”, confesó entre lágrimas.

La colaboradora televisiva no pudo ocultar su tristeza y destacó que “mi madre ha sido maravillosa”, aprovechando la ocasión para expresar su gratitud a aquellos compañeros de trabajo que, aunque no respondieron a sus mensajes de apoyo, estuvieron presentes en su momento de necesidad.

Demostrando su espíritu generoso, Lydia mencionó que había recibido un mensaje de Terelu, lo que la sorprendió dada la distancia que ha habido entre ellas en los últimos meses. “Estoy muy emocionada porque no lo esperaba”, compartió, reconociendo la importancia de ese gesto en este momento tan difícil.

Además, Lydia subrayó la relevancia del mensaje, señalando que “con lo dura que he sido, merece la pena mencionarlo”, refiriéndose a la sinceridad y belleza del comunicado que Terelu le envió. “Quiero decirlo públicamente porque ha sido algo especial”, concluyó.