En el marco de unas esperadas Finales de la NBA, que darán inicio este viernes a las 02:30 horas, los Oklahoma City Thunder se enfrentarán a los Indiana Pacers en una serie histórica. Los Thunder, que han sido los dominadores de la Conferencia Oeste y concluirán la temporada como el mejor equipo regular, buscarán alzarse con su primer título desde que se mudaron a Oklahoma. En su camino, tendrán que superar a los Pacers, quienes, a pesar de ser cuartos en la Conferencia Este, se han convertido en la gran sorpresa de los playoffs tras alcanzar esta fase por segunda vez en su historia.

El equipo de Oklahoma no ha tenido la oportunidad de jugar una final desde 2012, cuando cedieron ante los Miami Heat. Por su parte, los Pacers alcanzaron la antesala de la gloria en el año 2000, pero no pudieron contra los legendarios Los Ángeles Lakers. Ahora, ambos equipos llegan a esta final con una plantilla juvenil y con mucho por demostrar, ante un escenario que no se veía desde hace años.

La construcción cuidadosa de las dos franquicias ha llamado la atención; no han acelerado el proceso de armar un equipo con estrellas, sino que han preferido desarrollar su talento interno. Shai Gilgeous-Alexander, canadiense de Oklahoma, y Tyrese Haliburton, oriundo de Estados Unidos, se unieron a sus respectivos equipos a través de intercambios. Aunque inicialmente no estaban considerados como los mejores del deporte, su desarrollo ha sido fundamental para sus conjuntos durante la temporada 2024/25.

Los Thunder han sido un fenómeno en esta temporada, finalizando con un impresionante registro de 68 victorias contra solo 14 derrotas. Con sus dudas iniciales sobre la inexperiencia en playoffs, demostraron que pueden superar adversidades, despachando a los Memphis Grizzlies, luego a los Denver Nuggets en un impresionante séptimo partido y finalmente venciendo a los Minnesota Timberwolves con facilidad.

Toda la atención se centra en Gilgeous-Alexander, quien ha tenido un año espectacular y ahora es el octavo jugador en la historia de la NBA en conseguir su primer premio MVP y llegar a las finales en la misma campaña. Su objetivo es finalizar esta temporada de ensueño con un campeonato y una corona como el mejor jugador de las Finales.

El sistema defensivo de los Thunder ha sido fundamental, complementándose con un juego interior robusto gracias a jugadores como Isaiah Hartenstein y Chet Holmgren. Además, la contribución de Jalen Williams junto con la solidez de Luguentz Dort y Alex Caruso juegan un papel crucial en el desarrollo del partido, ya que podrían obstaculizar los esfuerzos ofensivos de los Pacers.

Meanwhile, los Indiana Pacers han logrado sorprender a todos en una Conferencia Este donde los pronósticos favorecían a equipos como los Cleveland Cavaliers y los Boston Celtics. Bajo el liderazgo de Haliburton, el equipo ha demostrado ser letal, eliminando a los Milwaukee Bucks en primera ronda y superando a los Cavs en las semifinales. También despidieron a los New York Knicks con un esfuerzo notable.

Haliburton, un ‘playmaker’ que se destaca en un contexto donde muchos priorizan la anotación, ha sido fundamental en el juego colectivo del equipo. Su principal aliado, el camerunés Pascal Siakam, quien fue nombrado mejor jugador de las Finales de la Conferencia Este, ofrece la experiencia necesaria, habiendo sido campeón con los Toronto Raptors en 2019.

La eficacia y el compromiso de los jugadores secundarios como Myles Turner, Andrew Nembhard, Aaron Nesmith y Benedict Mathurin serán esenciales para hacer frente a un equipo de los Thunder que parece tener una ventaja en la zona interior. Además, el experimentado entrenador de los Pacers, Rick Carlisle, quien ya ha demostrado su valía al llevar a los Dallas Mavericks al título en 2011, jugará un papel clave en la estrategia frente a Mark Daigneault, quien vive su primera experiencia en unas Finales de la NBA.