La ciudad de Mánchester se vio sacudida el pasado jueves por un ataque terrorista que ha dejado un saldo trágico de dos muertos y cuatro heridos. La Policía ha identificado al presunto autor del ataque, un británico de 35 años llamado Yihad al Shami, de ascendencia siria. La confirmación fue hecha a través de un comunicado emitido por la unidad antiterrorista, aunque aún no se ha llevado a cabo una identificación formal.

En el desarrollo de los hechos, se informó que el atacante, que fue abatido por las fuerzas de seguridad, portaba lo que parecía ser un cinturón explosivo. Sin embargo, tras una evaluación del supuesto artefacto, se determinó que no era viable, lo que ha elevado las inquietudes sobre la posible intención de causar mayores estragos.

La situación se tornó aún más seria con la detención de tres individuos que supuestamente están relacionados con el atentado. Entre ellos se encuentran dos hombres en sus treintas y una mujer de alrededor de 60 años. Estos individuos han sido arrestados bajo sospecha de involucrarse en actos terroristas, incluyendo su preparación e instigación.

El ataque se desarrolló alrededor de las 9:30 de la mañana hora local, comenzando con un atropello a un grupo de personas que, lamentablemente, culminó en un apuñalamiento. El jefe de la Policía de Mánchester, Stephen Watson, ha indicado que las víctimas eran miembros de la comunidad judía, lo que añade un matiz preocupante a la motivación del agresor.

Un aspecto heroico se destacó en la respuesta de la comunidad y las fuerzas del orden; el atacante intentó acceder a una sinagoga que estaba repleta de fieles celebrando el Yom Kippur, el día más sagrado del calendario judío. Gracias a la rápida reacción del personal de seguridad y la intervención de la Policía, el atacante no logró entrar, evitando así una tragedia de mayores dimensiones.