La organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF) ha denunciado "una falta sistemática de respeto al Derecho Internacional Humanitario" por parte de Israel en su ofensiva militar en la Franja de Gaza. La situación en la región ha sido catalogada como "una catástrofe humanitaria sin precedentes" por parte de MSF.

El coordinador general de MSF en los Territorios Ocupados Palestinos, David Cantero, ha hecho un llamado a un alto el fuego inmediato y ha pedido que se detengan los ataques indiscriminados contra la población civil. Ha destacado que alrededor de 10.000 personas han perdido la vida, siendo dos tercios de ellas mujeres y niños. Además, ha resaltado la falta de acceso a la ayuda humanitaria, especialmente alimentos, agua y medicamentos.

Cantero ha asegurado que la situación en los hospitales de la Franja de Gaza es catastrófica y dantesca, y que se encuentran al borde del colapso. Ha denunciado que más de cien estructuras de salud han sido atacadas y que al menos 150 trabajadores sanitarios han sido asesinados durante la ofensiva.

El coordinador de MSF ha hecho hincapié en que la situación en Gaza no puede ser ignorada, y ha alertado sobre el aumento de la violencia en Cisjordania y Jerusalén Este. Ha señalado que el número de muertos, heridos y desplazados forzosos ha alcanzado cifras no vistas desde principios de los años 2000. Además, ha destacado el aumento de ataques por parte de colonos y la violencia sistemática ejercida por las fuerzas de seguridad.

Cantero ha concluido que la situación actual en la región es alarmante y que se necesitan medidas urgentes para proteger a la población civil y garantizar el acceso a la ayuda humanitaria.