El operativo realizado por el Servicio de Información de la Guardia Civil ha logrado evitar el envío inminente de un barco con componentes de drones kamikazes hacia Líbano, poniendo en riesgo la seguridad colectiva y la de los ciudadanos de Israel.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ordenó la prisión de Firas Arab Housseini, detenido en Barcelona en una operación que también implicó a otros dos individuos en España y un cuarto en Alemania.

Estos ciudadanos libaneses fueron identificados como una estructura logística de drones de Hezbolá en Europa, utilizando empresas españolas para sus operaciones.

Se estima que con el material confiscado podría haberse construido una gran cantidad de drones kamikazes, utilizados por Hezbolá para fines terroristas.

El juez considera a Firas Arab Housseini un colaborador potencial de Hezbolá, involucrado en la adquisición de materiales para convertir en armas de guerra utilizables contra objetivos en Israel y Europa.

El riesgo de fuga y la necesidad de analizar más material de forma confidencial llevaron al juez a ordenar la prisión provisional de Housseini.

La Guardia Civil ha resaltado el peligro significativo que representan estos drones kamikazes, capaces de transportar explosivos y difíciles de detectar y neutralizar.

La investigación reveló la adquisición de una gran cantidad de material en empresas de España y otros países para la fabricación de estos drones, incluyendo componentes electrónicos, motores, resinas y sustancias endurecedoras.