Este miércoles, el Ejército de Israel ha llevado a cabo la interceptación de la Global Sumud Flotilla, un grupo que reúne más de 40 embarcaciones con el propósito de enviar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. La operación se produjo apenas minutos después de que la flotilla denunciara haber avistado varias embarcaciones no identificadas en las cercanías del enclave palestino.

El Ejército israelí, en un mensaje transmitido por radio, advirtió a la flotilla que se estaba acercando a una zona de bloqueo y les instó a cambiar de rumbo. "Si realmente desean enviar ayuda a Gaza, pueden hacerlo a través de los canales establecidos", enfatizó el comunicado, subrayando la existencia de alternativas legalmente reconocidas para la distribución de ayuda.

Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Israel ha denunciado el propósito provocador de la flotilla a través de sus plataformas sociales, afirmando que su negativa a utilizar medios alternativos para la entrega de ayuda deja claro su intención de generar tensiones en la región.

Desde el lado de la flotilla, un portavoz ha contraatacado las afirmaciones del Ejército israelí, acusándolo de cometer crímenes de guerra por utilizar el hambre como un instrumento en el conflicto, y sostiene que estas acciones constituyen una violación del Derecho Internacional, justificando así su misión hacia Gaza.

En el transcurso de los acontecimientos, las embarcaciones de la flotilla han reportado problemas de comunicación, con interferencias que han interrumpido en varias ocasiones su transmisión en vivo de la travesía, evidenciando los complicados desafíos a los que se enfrentan en su intento por alcanzar el enclave.