El Gobierno italiano ha tomado la decisión de declarar el estado de emergencia como respuesta al creciente flujo migratorio que ha llegado a sus costas. Se rescataron a más de 2.000 personas del mar Jónico y el Mediterráneo durante el fin de semana pasado.

Nello Musumeci, el ministro de Protección Civil y Políticas Marinas, propuso la medida durante una reunión del Consejo de Ministros. Musumeci ha declarado que ha habido un aumento del 300% en la llegada de migrantes por las rutas del Mediterráneo.

El ministro ha expresado que "el problema no se puede resolver. La solución solo está vinculada a una intervención consciente y responsable de la Unión Europea." También ha participado en una reunión en el Ministerio del Interior para discutir posibles soluciones a la crisis migratoria.

Esta medida, que estará en vigor durante seis meses, permitirá que las estructuras estatales reciban cinco millones de euros del Fondo de Emergencias Nacionales. Esto tiene como objetivo facilitar la acogida de migrantes, así como fortalecer las herramientas de repatriación y expulsión.

La decisión se hace después de que las autoridades italianas anunciara el lunes que más de 2.000 migrantes han sido rescatados en el mar Jónico y el Mediterráneo durante el fin de semana. La Guardia Costera italiana notificó que casi un millar de migrantes llegaron a Lampedusa, una gran parte de los cuales eran menores de edad.