Este 5 de junio, la socialité Isabel Preysler ha hecho una notable aparición en Madrid, rompiendo su silencio mediático tras el fallecimiento de su expareja, Mario Vargas Llosa, ocurrido el 13 de abril. La ocasión fue la gala de los 'Elle Style Awards', celebrada en el majestuoso Teatro Real, donde Isabel se presentó con una sonrisa radiante, acompañada por sus hijas, Tamara Falcó y Ana Boyer, quienes son su gran apoyo.

La gala, que reunió a numeroso público de celebridades, fue un evento exclusivo en el que también se dejaron ver figuras como Paula Echevarría, Sebastián Yatra, Eva González y Carmen Lomana, así como estrellas internacionales como la supermodelo Elle McPherson y el actor Luke Evans. La presencia de estas personalidades resalta la magnitud de una velada que prometía ser memorable.

Isabel, siempre brillante y elegante, deslumbró a los presentes con un vestido de corte ajustado en un delicado azul cielo, complementado con una falda de gasa plisada que aportaba un aire de sofisticación. Sus hijas, Tamara y Ana, no se quedaron atrás en cuanto a estilo, con vestidos que rivalizaron con el de su madre, cada uno reflejando su propia personalidad y elegancia.

Durante su reaparición, Isabel se mostró simpática y relaxed, indicando que se siente "muy bien". Aclaró que su ausencia en la esfera pública no debe interpretarse como un signo de tristeza, como algunos habían especulado. "He estado en casa, sí. Muy bien, muy contenta", afirmó, desmintiendo rumores sobre su estado emocional.

Sin embargo, en un momento de gran expectación, se mantuvo al margen de comentar sobre la fallecimiento de Vargas Llosa, el que fuera su compañero durante ocho años. Aunque muchos esperaban escuchar algunas palabras sobre su relación y su pérdida, Isabel prefirió no pronunciarse al respecto, optando por no abordar el tema que tan íntimamente la relaciona con el autor peruano.

Con su regreso al ojo público, Isabel Preysler demuestra que sigue siendo una figura relevante en el panorama social español, manteniendo su elegancia y carisma intactos a pesar de las adversidades personales que ha enfrentado recientemente.