En un giro inesperado en la octava edición de la Laver Cup, el tenista español Carlos Alcaraz no logró superar al estadounidense Taylor Fritz, cediendo el encuentro con un marcador de 6-3, 6-2. Este acontecimiento tuvo lugar el pasado sábado en el Chase Center de San Francisco, donde el equipo del resto del mundo se adjudicó una victoria crucial, acercándose aún más a Europa con un total de 9 puntos frente a 3.

Durante esta segunda jornada, Alcaraz, quien hace apenas un día destacó al lado del checo Jakub Mensik en un partido de dobles, se enfrentó a un Fritz muy determinado, que dio muestra de su habilidad tanto desde la línea de fondo como en la red, impresionando a íconos del deporte como Roger Federer y Stephen Curry, quienes presenciaban el encuentro.

Este fue el primer partido individual del murciano desde su victoria en el US Open, una derrota no anticipada ya que venía de un impresionante recorrido desde la final de Wimbledon, donde también había cayó ante el italiano Jannik Sinner. A pesar de tener dos oportunidades de rompimiento en el primer juego, Alcaraz no pudo capitalizarlas, y Fritz se mostró firme, logrando un quiebre en el cuarto juego para quedarse con el primer set.

La situación se complicó en el segundo set, donde Fritz dominó al encadenar cinco juegos consecutivos después del emparejamiento 2-2, lo que resultó en una derrota rápida para el español. El equipo del resto del mundo tuvo una jornada excepcional, llevándose los ocho puntos disputados en la competición y dejando a Europa en una posición desventajosa.

Antes de la participación de Alcaraz, las victorias del australiano Alex de Miñaur sobre el alemán Alexander Zverev (6-1, 6-4) y del argentino Francisco Cerúndolo ante el danés Holger Rune (6-3, 7-6(5)) habían puesto al equipo del resto del mundo en una posición favorable. La jornada también vio cómo el dobles formado por Rune y el noruego Casper Ruud se entregó ante la pareja estadounidense de Alex Michelsen y De Miñaur (6-3, 6-4). El prestigioso trofeo se decidirá al mejor de 13, con cada partido del domingo valiendo tres puntos.