En un análisis sobre la situación hídrica en España, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) confirmó que el país sigue enfrentando una sequía prolongada, a pesar de las significativas lluvias que se registraron en marzo. Rubén del Campo, portavoz del organismo, señaló que el pronóstico para abril podría ser decisivo.

Del Campo indicó que, al examinar los datos acumulados, se observa que España todavía no ha salido del periodo de sequía de larga duración, aunque está cerca de hacerlo. "Si abril resulta ser un mes particularmente lluvioso, existe la posibilidad de que logremos salir de esta situación, pero es necesario esperar a analizar los datos de este mes", comentó en una entrevista con Europa Press.

Es importante destacar que, según Del Campo, no se encuentra en curso una 'sequía a un año' en prácticamente ninguna región del país, lo que significa que las precipitaciones durante el último año han sido satisfactorias. Sin embargo, se mantiene la alertante condición de 'sequía de larga duración' en importantes cuencas, como las del Guadiana, Guadalquivir, Sur de Andalucía, Ebro y Pirineo oriental, ya que estas se evalúan en función de las precipitaciones en un periodo más extenso de 36 meses.

Por otro lado, aunque las cuencas del sureste, como las del Júcar y Segura, no se clasifican técnicamente como en sequía de larga duración, presentan un déficit en precipitaciones en el horizonte de tres años. En cambio, las cuencas situadas en el noroeste del país muestran una situación más favorable.