 
                                        En un enfrentamiento complicado, el Rayo Vallecano logró un empate 2-2 este jueves contra el BK Häcken en Suecia, durante la segunda jornada de la fase de grupos de la Conference League 2025-26. A pesar de no haber brillado, el equipo español salvó un punto gracias a un penalti anotado en el tiempo de descuento.
Dirigidos por Iñigo Pérez, los jugadores del Rayo presentaron un once modificado y se encontraron rápidamente a la defensiva, cediendo el control del juego a un adversario que mostró una clara intención de mantener la posesión y combinar con precisión. Aunque Álvaro García había abierto el marcador a los 15 minutos tras una jugada brillante de Sergio Camello, el resto del partido fue una lucha constante por recuperar el balón.
El BK Häcken, tras un inicio prometedor del Rayo, comenzó a adueñarse del esférico y pronto logró nivelar el partido antes del descanso gracias a un gol de Julius Lindberg. Consciente de su dominio, el cuadro sueco continuó presionando y logró dar la vuelta al marcador con un tanto de Isaac Brusberg en la segunda mitad, dejando al Rayo en una situación complicada, aunque todavía quedaba tiempo por delante.
Lejos de rendirse, el Rayo Vallecano ajustó su estrategia y comenzó a buscar ansiosamente el empate. Las sustituciones resultaron clave, con Alemao y Jorge de Frutos intentando abrir brechas en la defensa sueca, que se mostraba cada vez más vulnerable. A pesar de un disparo de Pacha Espino que se estrelló contra el travesaño, fue la insistencia del equipo lo que generó varias ocasiones, incluida una clara reclamación por penalti tras un contacto en el área.
La controversia llegó de la mano de un choque entre Álvaro García y el defensor Olle Samuelsson, donde el VAR intervino tras la falta en el tiempo añadido. El árbitro señaló el penalti, que Andrei Ratiu convirtió sin titubear, sellando el 2-2 en el minuto 103 y evitando una derrota que se perfilaba como una dura realidad para el Rayo.
A pesar de un rendimiento menos que ideal, el empuje final del Rayo consiguió rescatar un punto que les permite continuar en la lucha por los primeros puestos de su grupo, sumando un total de cuatro unidades tras su victoria anterior frente al Shkëndija. El equipo de Vallecas, aunque consciente de sus deficiencias, sigue demostrando un espíritu combativo en la competición europea.
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