La Embajada de Rusia en Pretoria ha acusado a Estados Unidos de intentar influir en la política exterior de Sudáfrica al acusar a las autoridades sudafricanas de enviar armamento al Ejército de Rusia durante la guerra contra Ucrania. Según la legación rusa en Pretoria, el embajador estadounidense Reuben Brigety no proporcionó evidencias que respaldasen tales acusaciones más allá de su convicción personal.

La Embajada rusa ha criticado la política exterior de Estados Unidos y ha denunciado que la elección de culpables y la diplomacia del megáfono son características típicas de la política estadounidense. Además, ha lamentado que Estados Unidos haya perdido su capacidad de interactuar con socios en igualdad de condiciones hace mucho tiempo y que la amistad con Estados Unidos solo sea posible bajo las reglas estadounidenses.

Las autoridades diplomáticas rusas han aclarado que las armas producidas por Sudáfrica no coinciden con el calibre del armamento ruso y han cuestionado cómo una cantidad "tan minúscula" de armas y municiones suministradas por Sudáfrica podrían influir en el conflicto. En esta línea, Rusia ha cuestionado al embajador Brigety por qué denuncia este supuesto envío de armas y municiones sudafricanas a Moscú pero "se siente perfectamente bien con el hecho de que su país y sus satélites hayan estado entregando armas a Ucrania desde 2014". Además, la Embajada rusa ha denunciado que la cantidad total de suministros militares occidentales para el régimen de Kiev ha superado los 100.000 millones en 2023 --más de 92.000 millones de euros-- y que Washington ha aprobado un nuevo lote por otros 1.200 millones --más de 1.104 millones de euros--.

El Gobierno de Sudáfrica convocó al embajador estadounidense en el país para trasladarle personalmente su malestar por unas declaraciones previas en las que acusaba a las autoridades sudafricanas de permitir el envío de armas a Rusia a finales de 2022. El embajador norteamericano aludió en concreto a un barco ruso que atracó en una base naval de Ciudad del Cabo en diciembre de 2022 vinculándolo a su vez a la guerra de Ucrania, aunque Sudáfrica ha defendido recientemente su posición de "no alineamiento" en el conflicto ucraniano.

Además, Sudáfrica ha asegurado que esta equidistancia no favorece al país invasor y ha remado en favor de que Moscú y Kiev hayan acordado recibir una delegación de países africanos con el objetivo de encontrar una solución pacífica al conflicto.