En un duro revés para DR Automobiles Groupe, la Autoridad Garante de la Competencia y del Mercado (AGCM) italiana impuso una multa de seis millones de euros al fabricante de la marca EVO. La sanción se debe a la etiquetación ilegal de vehículos de fabricantes chinos como de manufactura italiana, una práctica engañosa que ha generado controversia.

El grupo italiano de automoción ha manifestado su desacuerdo con la decisión y ha anunciado su intención de impugnarla. Aseguran haber ofrecido compromisos para solucionar las preocupaciones planteadas por la autoridad italiana, pero estos no fueron aceptados.

En su defensa, DR Automobiles sostiene que nunca ocultaron la deslocalización de parte de su producción en el Lejano Oriente y señalan que es una práctica habitual en la industria automotriz. Argumentan que siempre han destacado su fuerte vínculo con Italia, especialmente con la región de Molise, donde se encuentra su sede central.

Asimismo, afirman que sus campañas publicitarias no buscaban promocionar una fabricación íntegra en Italia, sino resaltar el trabajo realizado en la sede central de Macchia d'Isernia, incluyendo investigación, desarrollo, diseño y producción de automóviles.

DR Automobiles Groupe planea expandir sus fases de producción en Italia, con la creación de una nueva planta de producción en Macchia d'Isernia para desarrollar nuevos modelos, incluidos los de propulsión eléctrica.

En relación a las conductas sancionadas por la AGCM, la compañía argumenta que los tiempos de espera para la reparación de automóviles se vieron afectados por la escasez de repuestos durante la pandemia, una situación común en todo el sector que se está normalizando.

La decisión de la autoridad italiana se enmarca en una ofensiva del gobierno liderado por la primera ministra Giorgia Meloni contra los vehículos que dan la impresión de ser fabricados en Italia pero que en realidad provienen de otros países. DR, con sede en Macchia d'Isernia, reconoce que sus vehículos tienen un alto porcentaje de preensamblaje en China, aunque realizan modificaciones importantes en Italia para cumplir con las normativas europeas.