
En Madrid, el 30 de mayo, surge una noticia que sacude el mundo del automóvil. Carlos Tavares, quien fuera consejero delegado de Stellantis, ha señalado que la elección de Antonio Filosa como nuevo CEO de la compañía es una decisión sensata y adecuada.
Tavares, en su primer encuentro con la prensa internacional tras su salida de la empresa, expresó su confianza en Filosa, afirmando que "es una selección lógica y creíble". Asimismo, hizo un llamado para que el nuevo director cuente con el respaldo necesario del consejo de administración para llevar a cabo su labor, dejando en el aire el futuro del grupo automotriz.
El anuncio del nombramiento de Filosa fue realizado el miércoles pasado. Con más de 25 años de experiencia en Stellantis y un historial de éxitos en el mercado estadounidense, Filosa ha sido finalmente designado para liderar el conglomerado automovilístico europeo.
Después de su salida inesperada en diciembre, Tavares se ha apartado de la industria y lleva una vida tranquila en su granja, dedicada a la producción de vino de Oporto. Su renuncia llegó en un contexto complicado, marcado por una notable caída en las ventas y los beneficios del grupo automotriz francés.
Antes de su partida, Tavares y el consejo de Stellantis tuvieron una serie de desacuerdos sobre sus propuestas de reducción de costos, llevadas a cabo en respuesta a la deteriorada situación financiera de la empresa. Sin embargo, Tavares mantiene un tono conciliador, afirmando que no guarda rencor hacia quienes hicieron que su mandato fuera difícil, y que en ocasiones, la vida empresarial conduce a decisiones difíciles de tomar.
Desde su salida, el panorama de la automoción ha cambiado drásticamente. Los aranceles implementados por la administración Trump han incrementado los costos y han creado desafíos en las cadenas de suministro, mientras que los fabricantes europeos se ven presionados por regulaciones cada vez más estrictas y por la competencia feroz de los productores chinos en el sector de vehículos eléctricos.
Tavares reconoce el impacto de los aranceles, aunque considera que estos son temporales. No obstante, anticipó una serie de fusiones en el sector europeo, ya que las empresas buscan optimizar costos y crear sinergias ante un entorno financiero complicado.
Además, hizo hincapié en que Europa enfrentará serias dificultades para producir vehículos eléctricos competitivos en términos de precio frente a sus contrapartes chinas, sugiriendo que el continente debería enfocarse en el desarrollo de automóviles de alta gama.
En los seis meses transcurridos desde su renuncia, Tavares ha recibido numerosas ofertas laborales atractivas de fabricantes asiáticos, que sin embargo ha decidido rechazar en favor de regresar a su hogar en Portugal.
Por otro lado, es de destacar que Tavares se despidió de Stellantis con una indemnización de 23,1 millones de dólares y ha planeado invertir en su granja, su viñedo en la región del Duero y en diversos proyectos empresariales.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.