El joven tenista murciano Carlos Alcaraz ha asegurado su puesto en la final del prestigioso torneo de Montecarlo, el tercer Masters 1.000 del año, tras vencer a su compatriota Alejandro Davidovich en una intensa semifinal que terminó con un marcador de 7-6(2), 6-4. Este triunfo marca una nueva oportunidad para que Alcaraz se lleve el título en el Principado.

Actualmente situado en la tercera posición del ranking mundial, Alcaraz se presentó con confianza en la pista de arcilla Rainiero III, donde superó a Davidovich en un encuentro que duró poco más de dos horas. Este título en Montecarlo representaría su primer éxito en esta competición, después de haber conquistado previamente el torneo de Róterdam, lo que añadiría un nuevo trofeo a su creciente palmarés.

La final del torneo monegasco se decidirá este domingo, y Alcaraz se enfrentará a uno de dos rivales: el australiano Alex de Miñaur, que ocupa la décima posición en el ránking, o el italiano Lorenzo Musetti, quien es la decimosexta raqueta del mundo. La decisión de su adversario dependerá del resultado del otro partido de semifinales.

Durante el primer set de su partido, Alcaraz mostró su fuerza y determinación, aunque no sin ocasiones de tensión. Tras un comienzo prometedor que lo vio tomar una ventaja de 3-0, el murciano se encontró en apuros, pero logró mantener su enfoque y concluir la manga en un emocionante tiebreak, donde finalmente se llevó el set.

En la segunda manga, Alcaraz se mostró más sólido y, tras superar varios momentos difíciles, logró deshacerse del servicio de Davidovich. A pesar de haber fallado múltiples oportunidades para cerrar el partido, el murciano se mostró resiliente y logró finiquitar el encuentro en su segundo intento, consolidando así su victoria.

Este será el segundo año consecutivo que Alcaraz compite en Mónaco, tras haber sido eliminado en su primer partido en 2022. Con su mirada fija en patentar un triunfo en tierras monegas, el joven prodigio del tenis español se prepara para llegar a la cúspide del torneo y, además, avanza con optimismo hacia su gran objetivo del año: el torneo de Roland Garros, donde espera dar lo mejor de sí.