El líder de Vox, Santiago Abascal, ha celebrado que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, haya atendido las peticiones de su partido a cambio de su apoyo en una eventual investidura. Abascal informó al rey Felipe VI sobre la disposición de Vox de respaldar a Feijóo, con la condición de que el PP no colaborara en la creación de un cordón sanitario contra Vox ni atacara a su partido.

Entre las solicitudes de Abascal, se encontraba que el PP valorara públicamente los acuerdos alcanzados en cinco comunidades autónomas y cien ayuntamientos, así como trabajar para recuperar la neutralidad de las instituciones y la normalidad democrática.

Horas después, Núñez Feijóo aclaró en una rueda de prensa que había conversado con Abascal para aclarar los malentendidos y agradeció el apoyo de Vox, destacando que mantienen una relación de normalidad democrática y colaboran en diferentes gobiernos.

Abascal celebró que Feijóo haya atendido las peticiones de Vox y resaltó que se abre una nueva etapa de colaboración entre dos partidos diferentes pero capaces de respetarse y ponerse de acuerdo cuando es necesario.

Abascal expresó su esperanza de que los enemigos de los acuerdos de gobierno se abstengan de poner en peligro la construcción de una alternativa al presidente Pedro Sánchez.

La relación entre el PP y Vox se volvió tensa la semana pasada durante la sesión constitutiva de la XV Legislatura en el Congreso. Los 33 votos de Vox para Feijóo estuvieron en duda debido a la negativa del PP de ceder un puesto en la Mesa del Congreso a los representantes de Vox, lo cual fue interpretado como un intento de establecer un cordón sanitario contra el partido. Esta situación generó malestar en Vox, que criticó la falta de generosidad de los populares en contraste con su propio respaldo a Feijóo.

Abascal reiteró que apoyan al candidato popular para recuperar la normalidad democrática y la neutralidad de las instituciones, y denunció que ser excluidos del órgano rector del Congreso no era precisamente eso.