El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha emitido una seria advertencia respecto a las intenciones de Rusia, al señalar que podrían estar planificando una acción en Bielorrusia este verano. Durante un discurso en un encuentro virtual con líderes de Europa del Este, Zelenski destacó que estas situaciones son típicas precoces de lo que podría convertirse en un nuevo ataque armado.

Zelenski no solo se centró en la situación de seguridad en su país, sino que también expresó su solidaridad con España y Portugal, a raíz del apagón masivo sufrido el lunes en estas naciones. El mandatario ucraniano se comunicó con el presidente español, Pedro Sánchez, para ofrecer apoyo técnico en el manejo de la crisis energética emergente, que él considera un desafío que debe ser enfrentado en conjunto.

El líder ucraniano explicó que Ucrania ha adquirido una valiosa experiencia en la protección y restauración de infraestructuras eléctricas, desarrollada a lo largo de su enfrentamiento con Rusia. Esta experiencia, según él, incluye la recuperación de los servicios tras los constantes bombardeos y la defensa contra ciberataques, lo que convierte a su país en un socio valioso para cualquier nación que enfrente problemas energéticos.

En su discurso, Zelenski abogó por la creación de redes de cooperación que faciliten la asistencia entre países en momentos de dificultad, especialmente en lo que respecta al suministro eléctrico y a las comunicaciones. Al mismo tiempo, hizo hincapié en la necesidad de asegurar la infraestructura energética de Ucrania, particularmente en áreas cercanas a la frontera con Rusia, donde el riesgo de ataques es inminente.

Además de abordar la situación interna, Zelenski advierte sobre la implicación de Bielorrusia en el conflicto, avisando que Rusia está tramando algo en el territorio bielorruso. Aunque no proporcionó especificaciones, insinuó que las maniobras militares en la región podrían ser un pretexto para justificaciones de acciones agresivas. Su advertencia es clara: la presencia y actividad militar rusa podría representar un peligro no solo para Ucrania, sino también para otros países vecinos como Lituania y Polonia.