Un nuevo temblor se ha registrado este domingo en Myanmar, agitando la localidad de Mandalay, ubicada en el centro del país. Este sismo, con magnitud de 5,1, es una de las réplicas del devastador terremoto que tuvo lugar el viernes anterior, el cual ha causado la trágica pérdida de más de 1.600 vidas y ha dejado a más de 3.400 personas heridas.

Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el epicentro del reciente sismo se localizó a 28 kilómetros al noroeste de Mandalay, con una profundidad de 10 kilómetros. Afortunadamente, hasta el momento no se han reportado nuevas víctimas o daños materiales significativos relacionados con este último temblor.

El terremoto del viernes, que alcanzó una magnitud de 7,7, originó una serie de réplicas, siendo la más intensa de estas una de 6,7 que se produjo pocos minutos después del sismo principal. La situación sigue siendo crítica y requiere atención, mientras las autoridades evalúan el impacto total de estos eventos sísmicos.